Pese
a que el inestable gobierno de Carlos Armando Bello Gómez, señaló ante los
medios masivos de comunicación otorgar ayuda a la ex guerrillera Hilda Flores
Solís, este se ha ido por el caño lodoso de la historia, como su propio gabinete
de gobierno ineficiente, mezquino e intolerante.
Hilda
Flores Solís, compañera de lucha del extinto guerrillero, Lucio Cabañas
Barrientos, solicitó hace unos dias a
través de los medios de comunicación –notas periodísticas de Marco Antonio Villegas
y Cuauhtémoc Rea- el apoyo solidario de la sociedad atoyaquense, esto debido al
incumplimiento del gobierno de Carlos Armando Bello Gómez -quien vociferó
hacerlo- de hacerse cargo de sus tratamientos médicos; a los cuales como en
todo el alcalde ha incumplido de manera soez e irresponsable.
Hoy
sus panegíricos o voceros dan una conferencia
de prensa, inventando ayudas fantasiosas y actitudes de solidaridad medica
criminales, cuando la realidad les abofetea sus palabras llenas de mentiras y vacíos
de apoyo.
Regidoras
municipales -cuyos nombres aguardo en el anonimato- han señalado que la
administración municipal atoyaquense ha negado la ayuda médica a la afectada en
su salud física; y, en otros apoyos los ha obviado por ser una entidad
ineficaz, ramplona y mentirosa.
Hoy
la enferma será fotografiada como ha sido la costumbre del patán de gobierno;
pero que nunca ni en si mismo cumple las palabras que deben ser sagradas y más
en una mujer como Hilda Flores, que le dio a Atoyac de manera conjunta con
Lucio, nombre y presencia internacional. Es esa misma voz que le recuerda a Carlos
Armando Bello Gómez, que cumpla con cabalidad.
La
moral y ética de la administración de Bello
Gómez ha quedado en el juicio sumario de la sociedad que le demostró en la
urnas, el desprecio no tan solo a su persona, sino a su candidato perredista,
por carecer de respeto y buenas costumbres.