Algunos ejercicios podrían parecer muy comunes
y sin sentido, pero realmente son ejercitadores de nuestra memoria
Considerado como una parte importante de
nuestra salud, nuestra memoria, además de ser un almacenaje de vivencias
adquiridas en el transcurso de nuestra existencia, requiere una atención
adecuada, ya que no sólo se generan problemas en ella cuando se llega a la
tercera edad, indicó el IMSS Guerrero.
Para su buen funcionamiento, es necesario que
la persona se aleje del estrés y la ansiedad, ya que la afectan. De acuerdo a
los especialistas, la memoria es la facultad psíquica por medio de la cual se
retiene y recuerda el pasado, es decir, es un completo y complejo sistema de
interconexiones neuronales que permiten la recuperación de información
almacenada previamente.
El coordinador de Prevención y Atención a la
Salud a nivel delegacional, Roberto
Valdez Ortiz destacó que una vida integralmente saludable, con alimentación y
ejercicio, son fundamentales para “el trabajo” que realiza nuestra memoria.
Comentó que sin ser un problema exclusivo de
los adultos mayores, la memoria y otros procesos cognitivos empiezan a
deteriorarse con la edad. Por ello es de suma importancia que se ejercite el
cerebro, a fin de mantenerlo en las mejores condiciones al paso del tiempo.
Indicó, que algunos ejercicios podrían parecer
muy comunes y sin sentido, pero realmente son ejercitadores de nuestra memoria:
ordenar los álbumes de fotos, ya que esas imágenes harán que se trata de
recordar varios aspectos de ese momento, logrando trabajar la memoria.
Hacer ejercicio físico, pues la práctica ayuda
a mejorar la oxigenación del cerebro, lo que permite a éste trabajar mejor; uso
de las dos manos, ya que realizar pequeñas tareas con la mano con la que no se
está acostumbrado, obliga al cerebro a crear conexiones nuevas.
Valdez Ortiz comentó que hacer pasatiempos
también contribuye, por ejemplo, la sopa de letras, rompecabezas y memorama son
juegos que aniquilan el aburrimiento y fortalecen la memoria.
Destacó que el paso del tiempo influye en la
pérdida de la memoria, pues el cerebro tiende a sufrir las consecuencias del
paso del tiempo según vamos envejeciendo segundo a segundo.
Determinadas enfermedades, sobre todo las
enfermedades cerebrales, contribuyen asimismo a una pérdida ya no solo de la
capacidad de la memoria, sino de la concentración.
Agregó que las recomendaciones no solo para
cuidar la memoria sino para tener una buena memoria y potenciarla es
imprescindible seguir una dieta equilibrada, basada especialmente en una
alimentación sana y saludable.