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| KARMELYNDA VALVERDE |
Son
ya tres semanas padeciendo un vacío emocional y mental. Me siento ante la
computadora y no llegan las ideas. Matahari jura que estoy ‘’bloqueada’’, mi
amiga Aleja la perredista dice que tengo fastidio, la cosa es que yo como el
yayo ¡no me hallo!…Neta que en estos momentos, como a la gran mayoría de la
cuatitud pozolera, no me sienta ningún fuste. Desfile del 20 de noviembre, suspendido en
algunos lugares donde las ‘’Adelitas’’ y los ‘’Panchos Villa’’ se quedaron
desvestidos y nada alborotados. En otros lados, el desfile estuvo como decimos
aquí en el Bello Nido ‘’chipe’’. Unas cuantas escuelitas marcharon sólo unas cuantas
cuadras, siempre con la zozobra de que el movimiento ayotzi o los
cetegovándalos nos amargaran la miel de las torrejas. Mientras tanto, sigue la bola de nieve
rodando y creciendo.
No
ha habido columnista, ni articulista, ni comentarista radiofónico o televisivo,
que no haya hablado de la tragedia que comenzó ese aciago 26 de septiembre. Tooodos tienen algo que decir al respecto, ya
sean estupendos análisis o simples chaquetas mentales, pero nadie quiere
permanecer chitón perico. Miles de horas al aire ya sea en la radio o la
televisión, hablando de la desaparición
de los 43, de los Guerreros Unidos y de la ‘’Pareja Imperial’’. Ah claro,
también de mi ometequense paisano.
Un
chorrotonal de ‘’próceres’’ y de ‘’analistas políticos’’ (bastante chafaltrafas,
por cierto) han saltado a la palestra pozolera. A cuál más de chuchas cuereras,
para señalar con índice flamígero los errores del Presidente Peña Nieto, del
Gobernador con licencia Ángel Aguirre Rivero, y de lo que debieron y no
debieron haber hecho ambos dos –según estos ‘’asesores’’ oficiosos-.
Y
neta, neta, neta, pobres de los ingenuos paisanos que dieron por hecho que la
solución a los desmanes protestantes derramadores del encono social, sería la dimisión de Ángel Aguirre, pero ¡oh
pellizqueshion! niguas. Seguimos jodidos
todos ustedes.
Como
si no fuera suficiente la frustración y la amargura que destilan ciertos
desadaptados que mañosamente han
enarbolado la bandera de los 43 desaparecidos, para hacer víctimas de sus
frustraciones al noble pueblo de Guerrero, se suman al big dismotherment, ¡los cetegistas! ¡Cristo de la
gloriaaa!!!...exactamente lo que nos faltaba para acabar de partirle mandarina
en gajos a mi pozolero estado.
¡Ahhhh!
Pero ¿qué pasa?... que como aquellos que se desgarraban la vestidura exigiendo
la salida de Ángel Aguirre, son exactamente los mismos que a los dos días de
haber asumido la gubernatura interina, don Rogelio Ortega, ya estaban
sofocándose y dando palmas a manera de atosigamiento, para que –según ellos-
agarre el paso.
Caray,
caray…lo he dicho y muy bien dicho: ningún fuste no sienta. ¡Arajo, hermanito chulo! ¡Pero hacen
feo!...oyeeee, dejen que don Rogelio se siente bien en la silla primero. Si no
son memelitas de manteca ¡es un semejante paquetón el que súbitamente le
pusieron en las manos!. Y creo que como bien dice don Miguelito Mata de
toditiitos mis aprecios ‘’ni permiso le pidieron’’.
Confiemos
en que don Rogelio, además de excelente académico es un hombre probo, bien
intencionado y conocedor del teje y maneje izquierdoso, pero de esa izquierda
de altura, responsable, nada que ver con la izquierda chafona que se ha
enquistado en el partido del sol aztequiux, compa.
Y
neta, neta, neta, yo no se ustedes, pero los que hemos aceptado La Biblia como
un código de fe y conducta, estamos mandatados a orar por nuestros gobernantes,
a clamar día a día para que papá Dios les de guía, dirección y una restauración
espiritual de la fe, amén de que derrame sobre ellos sabiduría para que
gobiernen de acuerdo a sus preceptos….eso, en vez de la tijerita veloz.
P.D.
Y que también nos conceda que nos siente el fuste…