Más
de 43 casos críticos en Guerrero.
·
Desprotegida
la sierra y La Montaña.
Los enfermos de dengue y el
chinkungunya han ido en aumento por que las autoridades de salud prefieren
ocultar la realidad de la proliferación de casos lo cual afecta a que demás
personas no le den la importancia al tema y se tengan más contagios.
Después de que se anunciara
que solo estaban registrados 43 casos en
todo el estado, la realidad es que existen muchos enfermos en hospitales
públicos y particulares y otros más en sus hogares con los síntomas, por lo que
debía dársele la importancia sin el temor a causar temor entre la población
pues esto desinforma y le resta importancia ya que debido a esta causa de
enfermedad muchas personas están dejando de asistir a sus actividades cotidianas
y otras más han estado graves de salud,
como el caso de muchas personas en Atoyac de Álvarez.
En El puerto de Acapulco se
ha informado por las redes sociales de
muchas personas enfermas en pleno
centro de la ciudad (solo de los casos que se conocen) ubicados en calle Eduardo
Mendoza número 13 y 16 donde se reportan cuatro casos.
Por otra parte se ha
denunciado que muchas personas no tienen
acceso a realizarse los análisis clínicos debido al alto costo de los reactivos
por lo que sea probable que sea por ello la desinformación por que no se cuenta
con la cantidad suficiente de reactivo; esto por voz de una madre de familia de Atoyac de Álvarez,
quien omitió su nombre porque al final señaló que las autoridades en vez de
actuar se molestan y piden información de los denunciantes y que hasta el
momento su hija ya salió de la crisis del peligro de muerte por estas causas de
dengue pero que sirva el antecedente para orientar e informar a más ciudadanos.
Entre los síntomas que
refieren ciudadanos se encuentran fiebre, dolores de articulaciones y músculos
y vómitos y otros más señalaron que cuando se presenta hemorragia pueden ser
por la nariz, encías o debajo de la piel y para el caso del chikungunya señalan
han presentado fiebres de 40 grados, dolores musculares y de la cabeza, con
malestar general, posibilidades de náuseas y sensación de cansancio; tal cual
fue el caso de la hija de denunciante de
la ciudad de Atoyac de Álvarez.
