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| EFRAÍN FLORES IGLESIAS |
Los candidatos a la Presidencia Municipal de Tixtla arrancaron por fin
sus campañas. Cada quien lo hizo de manera prudente, sin banderines, matracas
ni acarreados.
Los equipos de campaña de los candidatos Saúl Nava Astudillo (PRI-PVEM-Panal) y Hossein Nabor Guillén (PRD-PAN-PT) empezaron a operar en las
primeras horas del miércoles. Tanto el abanderado priista como el perredista, iniciaron
su arranque de campaña montando una guardia de honor ante la estatua del
generalísimo Vicente Guerrero Saldaña.
Claro, cada quien lo hizo en horarios diferentes para no chocar.
El primero en llegar fue Hossein Nabor, quien acompañado de la candidata
perdedora a la gubernatura, Beatriz
Mojica Morga; del dirigente de la corriente aguirrista Izquierda Progresista de Guerrero (IPG), Demetrio Saldívar Gómez; de la diputada
local por Quechultenango, Erika Alcaraz
Sosa, y de dirigentes locales, dijo que iba a ser respetuoso de las
acciones que emprendieran los integrantes de la Asamblea Popular de Tixtla.
Eran las 7:45 de la mañana y el clima era
fresco. Algunos iban
abrigados y otros no. Los semblantes serios de los perredistas indicaban
preocupación. ¿De qué? Sólo ellos sabrán. Pero así fue el arranque de campaña
del candidato perredista.
El aguirrista Demetrio Saldívar exigió al
presidente Enrique Peña Nieto, al gobernador Héctor Astudillo Flores y al
alcalde provisional Raúl Vega Astudillo no meter las manos en la elección
extraordinaria. Y al
estilo de Andrés Manuel López Obrador
para justificar una derrota anticipada dijo: “Vamos a enfrentar una elección de Estado. Les exigimos que se amarren
las manos (gobiernos federal, estatal y municipal), que no enrarezcan el
proceso electoral, que no utilicen los programas sociales para beneficiarse”.
Lo que olvida Demetrio Saldívar es lo que
hicieron ellos –los perredistas– cuando estaban en el gobierno estatal. Su
candidato Hossein Nabor era funcionario de la administración corrupta de Ángel
Aguirre Rivero, en el cual usó su posición para promoverse como aspirante a
la Presidencia Municipal de Tixtla, así como también lo hizo Ángel Aguirre Herrera en el municipio
de Acapulco. Y en ese entonces don Demetrio
estaba muy calladito.
A las 8:40 am Hossein Nabor emprendió la
retirada junto con su comitiva para refugiarse en un salón de fiestas para anunciar algunas acciones y
seguir despotricando en contra del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y
del gobernador Héctor Astudillo.
Para ese entonces ya había militantes del PRI en el jardín central,
quienes saludaban al ex dirigente estatal de ese partido y actual diputado
local, Cuauhtémoc Salgado Romero,
quien asistió a Tixtla para acompañar a su amigo Saúl Nava Astudillo.
Cuando el reloj marcaba 8:50 hizo acto de presencia el candidato
priista, quien saludó de mano a todos los que se dieron cita a su arranque de
campaña, y era acompañado por el delegado con funciones de presidente del PRI
en la entidad, José Parcero López.
También estuvieron presentes los ex alcaldes de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos y José Luis Peralta Lobato; de Tixtla, Edgardo Astudillo Morales y Jorge Luis
Campos Espíritu; dirigentes municipales del PVEM y del Panal, y algunos
comisarios.
Al hacer uso de la palabra, Nava Astudillo dijo que el 29 de noviembre
refrendará el triunfo obtenido el pasado 7 de junio y que su campaña no será de
confrontación. “Volveremos a ganar y lo
haremos sin trampas, porque tenemos un trabajo de años que nos respalda”.
Después de montar guardia de honor en el monumento del generalísimo
Vicente Guerrero, inició un recorrido por el mercado “Antonia Nava de Catalán”,
en donde fue muy bien recibido por los locatarios, quienes le manifestaron su
respaldo.
Los candidatos de Movimiento Ciudadano, Luis Muñoz Vázquez; de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Félix Alberto Campos Crispín, y del
Partido Humanista, Vicente Barrera Pablo,
realizaron eventos privados.
Lo bueno de todo es que no hubo acciones violentas por parte de la
Asamblea Popular de Tixtla durante los arranques de campaña de los 5
candidatos. Y ojalá no se les vaya a ocurrir confrontar a la ciudadanía el día
de la elección, porque los ciudadanos están en su derecho de elegir a sus
autoridades.
ENTRE OTRAS COSAS… Durante la sesión de este jueves en el
Congreso local, el diputado priista Héctor
Vicario Castrejón propició polémica entre sus compañeros al proponer en
tribuna un reconocimiento al presidente Enrique
Peña Nieto por su apoyo al estado de Guerrero durante la contingencia
originada por los meteoros “Manuel” e “Ingrid” en septiembre de 2013 y, sobre
todo, por destinar recursos millonarios a través del Plan Nuevo Guerrero para
la reconstrucción de edificios escolares, puentes, carreteras y caminos.
Eso no gustó a los perredistas Sebastián
de la Rosa Peláez y Maricarmen
Cabrera Lagunas, así como la representante de Morena, Ma. de Jesús Cisneros Martínez, quienes le echaron montón.
Vicario Castrejón aguantó vara. Se defendió como pudo y salió
ganando. Su propuesta fue aprobada por mayoría de votos. ¡Zas!
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