miércoles, 18 de junio de 2014

A NO BAJAR LA GUARDIA FRENTE AL DENGUE: LLAMA COORDINADOR DE SALUD PÚBLICA DEL IMSS GUERRERO


Los cacharros olvidados en patios, azoteas y áreas comunes, son lugares elegidos por el mosquitos transmisor para su reproducción
  • Evitar la automedicación, ya que podría afectar más el estado de salud del enfermo
En las últimas semanas en la entidad se han registrado lluvias continuas, que son un factor importante para la reproducción del mosquito Aedes aegyti, transmisor del dengue, por lo que la población debe redoblar esfuerzos para evitar su propagación, explicó Humberto Reyna Echaniz, coordinador auxiliar de Salud Pública del IMSS Guerrero. 
Es común que la población tenga almacenados cacharros, llantas, cubetas, juguetes y otros artefactos, donde el agua de lluvia se acumula, misma que es aprovechada por la larva del mosquito para su reproducción masiva, explicó el especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social. 
Tan sólo un recipiente con agua almacenada puede servir para que un mosco hembra deposite hasta 500 huevecillos, como las llantas, o cubetas las cuales son el medio más buscado por el vector, por lo que es necesario que éstas permanezcan bajo techo y sin agua o en su caso que las tiren a la basura; esta última recomendación debe ser la más aceptada.
“La población no debe bajar la guardia contra la reproducción del dengue, y si bien se debe aplicar todo el año, es en esta temporada de lluvias cuando más se debe hacer, ya que cualquier cacharro tirado en el patio se convierte en potencial sitio de reproducción”, expresó el médico.
Indicó que otras recomendaciones sencillas son: utilizar en el hogar u oficina espirales, pastillas o líquidos fumigantes. Aplicar repelentes en aerosol, crema o líquidos en las partes del cuerpo expuestas, también es recomendable colocar mosquiteros o telas metálicas en las aberturas de las viviendas.
Asimismo, destacó que es de suma importancia que se tenga conocimiento de los síntomas que dan inicio al padecimiento, tales como: fiebre alta, fuerte dolor de cabeza, dolor de espalda, dolor en las “coyunturas” o articulaciones, náusea y vómitos, dolor en los ojos y erupción de la piel. Generalmente, la enfermedad es más leve en niños menores, que en los niños mayores y adultos.
El dengue hemorrágico se caracteriza por fiebre que dura de dos a siete días, con signos y síntomas generales que pueden ocurrir con muchas otras enfermedades, por ejemplo, náusea, vómito, dolor abdominal y dolor de cabeza.
Esta etapa es seguida por manifestaciones hemorrágicas, tendencia a tener fácilmente moretones, magulladuras, u otros tipos de hemorragias de la piel, sangrado por la nariz o las encías, y posiblemente sangrado interno.
Aclaró que aun cuando la población tenga conocimientos de los síntomas de la enfermedad viral, esto no implica que debe automedicarse, sino dirigirse inmediatamente a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) de su adscripción para recibir atención médica.