jueves, 29 de agosto de 2013

EL ESTRÉS SE PRESENTA A CUALQUIER EDAD, ALERTA ESPECIALISTA DEL IMSS


  • Las relaciones familiares pueden ser factor para padecerlo

  • Otorga el Seguro Social el tratamiento emocional necesario tanto a trabajadores como derechohabientes

El estrés es un estado anímico en el que se presentan alteraciones en cuanto a las emociones de un individuo, que genera reacciones secundarias oportunistas que imposibilitan aún más el desarrollo de las actividades cotidianas de las personas que la padecen, indicó la sicóloga de la Delegación Guerrero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Martha Alicia Reynoso García.

Indicó que el estrés se rige por tres etapas: resistencia, control y etapa de agotamiento y de ahí se empieza a percibir en áreas más específicas como son: abdomen, estómago, cuello y columna.

El estrés afecta el sistema inmune, dejando espacio para las llamadas enfermedades o infecciones oportunistas como son migrañas, colitis nerviosa, colitis crónica y gastritis, comentó la especialista.

“El estrés se puede concentrar en varias áreas de tu cuerpo, pero lo importante es que conozcas y se puede apreciar en parte alta de espalda, estómago, cabeza (cefaleas), la parte baja de la espalda, la columna vertebral también se acumula ahí”, expresó.

Reynoso García comentó que actualmente, en todos los grupos de edad se da frecuentemente el estrés, ya que tanto niños como adultos mayores pueden padecerlo por su entorno de vida.

“Todo depende de la edad, género,  los factores predisponentes, así como los factores determinantes; principalmente la familia porque las relaciones interfamiliares tiene mucho que ver con el estrés”.

El delegado estatal, José Luis Ávila Sánchez, informó que en la Delegación hay cursos de capacitación continua para que tanto trabajadores como los derechohabientes conozcan qué es el estrés, cómo se presenta y qué partes del cuerpo se afectan y cómo se puede tratar.

Destacó que el médico familiar es quien inicia el tratamiento de la persona con estrés, y posteriormente, de requerirse, canaliza al derechohabiente al área de sicología para tratar el aspecto emocional y su manejo adecuado.