lunes, 15 de junio de 2020

EPÍSTOLAS SURIANAS (Carta a Don Héctor) De Julio Ayala Carlos


PARALELO A LAS ACCIONES QUE REALIZA para prevenir y combatir el nuevo coronavirus, el Ayuntamiento de Chilpancingo también lleva a cabo la ejecución de obra pública, que, hay que decir, no se detiene, como tampoco la prestación de los servicios públicos, como la recolección de basura y agua potable, y en estos tiempos de lluvias, la limpieza y desazolve de barrancas y alcantarillas, así como un intenso programa de bacheo.

 

En efecto, pese a que hay una especial atención a la pandemia del coronavirus, el gobierno municipal que encabeza Antonio Gaspar Beltrán no ha descuidado, mucho menos paralizado la prestación de los servicios públicos, así como la obra programada, y en un capítulo aparte lo tendiente a las barrancas que atraviesan la ciudad capital, a fin de estar preparados por la temporada de lluvias y evitar, hasta donde sea posible, las consabidas inundaciones.

 

También, por ese motivo, el Gobierno de la Gente, como se hace llamar la administración de Gaspar Beltrán, ha llevado a cabo una intensa limpieza de las alcantarillas existentes en la ciudad, muchas de las cuales, decenas, prácticamente nunca habían sido desazolvadas, lo que ocasionaba serios problemas, debido al taponamiento en que se encontraban por la acumulación de tierra y basura arrastrada por el agua de las lluvias.

 

Ciertamente nunca como ahora el gobierno capitalino ha estado al pendiente de las barrancas que atraviesan la ciudad, en cuyos márgenes, hay que decirlo, se encuentran asentadas las viviendas de decenas de familias, a pesar del peligro que corren, ya por las aguas de las lluvias, o por el deslizamiento de la tierra. Sin embargo, pese al llamado y facilidades para su reubicación, allí continúan.

 

Hay que decirlo. Fueron precisamente las familias que vivían en los márgenes, e incluso en el cauce de las barrancas, y hasta del río Huacapa, las que sufrieron los destrozos causados por la tormenta Manuel y el huracán Ingrid en 2013, perdiendo en algunos casos, incluso la vida, y aún y cuando las autoridades, en sus tres niveles de gobierno, los reubicaron en algunos casos, y a otros les dieron amplias oportunidades para hacerlo, diversas familias se han vuelto asentar, con el consiguiente peligro que representa.

 

Además, como decíamos al principio, el alcalde Antonio Gaspar Beltrán lleva a cabo un intenso programa de bacheo de calles en la ciudad capital, lo que sin duda habla bien de su trabajo, en razón de que muchas, muchas arterias lo necesitan, ya por el paso de los años, o porque como es costumbre, los vecinos rompen el pavimento por el desperfecto de alguna tubería, y simplemente la dejan así o tapan el hoyo con tierra.

 

En este sentido, se pueden observar diversas cuadrillas de trabajadores del gobierno municipal bacheando avenidas y calles de la ciudad, tanto del Centro, en los barrios, y en las colonias populares.

 

Sin duda el presidente municipal no es, como dice el dicho, monedita de oro para caerle bien a todos, pero a juicio de muchos, Gaspar Beltrán hace su mejor esfuerzo, y lo que es mejor, entrega resultados, aún y cuando el gobierno que encabeza carece de los recursos suficientes para hacer más por Chilpancingo, pues la mayor parte del presupuesto aprobado por el Congreso del estado se disuelve en sueldos y salarios, y los ingresos propios, ciertamente son muy pocos, de tal forma que el margen de maniobra del edil es casi nada.

 

Por fortuna, y esto hay que decirlo, el Ayuntamiento de Chilpancingo, el municipio de Chilpancingo, y sus habitantes, los chilpancinguenses, tienen un gran aliado en el gobernador Héctor Astudillo Flores, oriundo de esta ciudad, quien una y otra vez, en un gran equipo con el presidente municipal, atienden y resuelven lo más prioritario para los capitalinos.

 

También, hay que decirlo, hace unos días se anunció una importante inversión del gobierno federal para el municipio y la ciudad capital, cuna de los Sentimientos de la Nación y del Primer Congreso de Anáhuac, encabezado por el Generalísimo José María Morelos. Se dijo que la inversión sería millonaria por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero hasta ahora solo ha sido un anuncio y nada en concreto.

 

Si ocurre, aunque ya estamos a la mitad del año, debe reconocerse, como se reconoció en su momento la que hizo el anterior Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, a raíz de los destrozos causados en el municipio por Manuel e Ingrid, tanto para su reconstrucción, como para dotar de una mayor de agua a la capital del estado.

 

Así que hay que esperar que ocurra la inversión anunciada para Chilpancingo, pues como bien se dice, mientras no se cumpla, sólo es un rollo, y ya sabemos cómo se las gastan los gobernantes, ya sabemos cómo se las gastan los políticos, pues así como dicen una cosa, dicen otra.

 

Por cierto, sería la primera inversión que el gobierno de López Obrador haga en Chilpancingo, quien durante la elección del 2018 le dio miles de votos.

 

Sí. Ojalá el Presidente de la República le cumpla a Chilpancingo. El gobernador del estado lo ha hecho, y el alcalde, Antonio Gaspar, hace lo propio.

 

Comentarios: julio651220@hotmail.com