lunes, 31 de enero de 2022

JAVIER TAJA, SE VA DEL PRI. . . DICEN LAS MALAS LENGUAS QUE YA SE HABÍA IDO. Por Jorge Falcón




Isaías Eduardo Gómez Ozuna, ex síndico y actual Jefe de Sagarpa en Atoyac de Álvarez.


·           *   Atoyac de Álvarez, priistas de camiseta y Morenos de corazón.

·         * Traidores al por mayor, no es nada noticioso, que se van del tricolor: militantes

 

Desde el pasado proceso electoral para elegir al gobernante de Guerrero, un grupo numeroso de militantes y simpatizantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ya estaban trabajando en las filas de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena); esto debido a que infinidad de integrantes de ese organismo político, se ejercieron como alcaldes y dejaron una estela de corrupción, desfalcos, atracos tanto en los presupuestos como en el gasto corriente, razón por lo cual la Auditoría General de la Federación, la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción del y la Secretaría de la Función Pública, andaban tras de ellos en investigaciones de los robado a las arcas. Por ello, se vieron en la imperiosa necesidad de trabajar para Morena y llevarla al triunfo, para salvar su pellejo y su dinero mal habido. Trascendido esto por un ex empleado municipal de la administración 2012-2015 y 2015-2018. Por cierto en este último trienio, fue corrido por malos manejos.



En ese mismo tenor, el padrinazgo que les encamina y protege para cometer todo tipo de tropelías en los dineros de los proyectos sociales, les tuvo que marcar pauta para alinearse y servir a la 4T. Con ello, buscar paliar y atenuar los golpes certeros y desvíos económicos que le propinaron a programas federales. Entre ellos, carreteras, unidades deportivas, escuelas, caminos vecinales y saca cosechas, programas deportivos y culturales, entre muchos programas que nunca se ejercieron en los hechos; pero el dinero fue a parar a la bolsa de estos malhechores de la grilla. Obviamente pagando el derecho de piso a sus padrotes políticos.



Tras entrevistar a varios ex dirigentes del tricolor y militantes engañados atoyaquenses señalaron "No es raro encontrar los nombres del ex alcalde de Atoyac de Álvarez, Javier Galeana Cadena, cuyo compadrazgo con Ángel Aguirre Rivero, le ha permitido andar de un organismo político a otro; y, además, entregarle la Dirección de la Mujer, a la esposa de éste Elizabeth Maya Paco, en la administración municipal de Acapulco, bajo el mandato de Abelina López Rodríguez. Galeana Cadena sin un gramo de dignidad salta de un lado a otro con tal de no estar fuera de la ubre gubernamental".

Por ese mismo tenor están el ex primer edil de la comarca cafetalera Edilberto Tabarez Cisneros (a) La Víbora, un mote que le indilgaron los Ticuiseños, en honor a su ancestro que de igual manera carecía de moral y de ética. Este vival ha sido acusado de haber dejado una deuda en el municipio atoyaquense superior a los doscientos millones de pesos, en el ejercicio 2012-2015 y en el abandono en la región de la Costa Grande de la única clínica para la atención y detección del cáncer de mama y cérvico uterino (donde Atoyac, alcanza los niveles más altos del Estad suriano de esa letal enfermedad) en complicidad con su síndico Isaías Eduardo Gómez Ozuna (a) El Pepitón, que desde antes se afilió a Morena, bajo la tutela de Pablo Amilcar Sandoval Ballesteros, aquel fracasado aspirante a la gubernatura de Guerrero y quien le fabricó, gestó y conformó la guerra sucia al ahora senador con licencia Félix Salgado Macedonio, que le costó exhibirlo a nivel mundial como un acosador y violador sexual.

Edilberto Tabarez Cisneros, ex alcalde de Atoyac y actualmente ocupa un cargo dentro de la administración estatal de Evelyn Salgado Pineda.

La alcaldesa de Atoyac de Álvarez, Clara Elizabeth Bello Ríos, debe investigar el destino de los dineros de esta clínica y de que se debe de terminar pues existen adeudos millonarios por el uso de los aparatos de detección del cáncer. Así como la terminación de la sala de Rayos X, que no reunía las características necesarias y vitales, para su operación. ¿O ya es cómplice de Tabarez Cisneros, en este desvío? Porque ha sido claro que muchas mujeres niñas, jóvenes y adultas mayores han muerto por carecer de este servicio médico que se presupuestó y que al paso de más de diez años, no se ha logrado clarificar ni el recurso económico ni la unidad médica de atención y detección del cáncer de mama.

 

Fredy Barrera Méndez, ampliamente conocido en el municipio del café, el mango y el plátano serreño, con el alias del “Judas electorero”, que llevó a la pérdida de la elección a la presidencia municipal de esta comarca, al priísta-perredista Antonio Gutiérrez Martínez, al truquear los votos tricolores por Morena. Fredy, traidor por naturaleza, llevó a la derrota al PRI y ello le valió algunos pesos de varios ceros. Pero no tan solo que le entregaron dinero, sino pidió una regiduría; allí los altos mandos pararon su ambición. Y, logró acomodar en la administración morenista en esta ciudad del café de Clara Elizabeth Bello Ríos, a varios de sus acólitos y asistentes.

 

El otro ex alcalde Dámaso Pérez Organes, en su supina ignorancia y cándida actitud, le valió unos pesos su transformación para trabajar a favor de Morena, siendo desleal a Mario Moreno Arcos, a quien apapachaban, dándole certera puñalada en cada abrazo que le daban al candidato, cada vez que éste iba para realizar su proselitismo; pero la celada o emboscada ya estaba fraguada.


Dámaso Pérez Organes, ex presidente municipal de Atoyac de Álvarez.


Hoy anuncian que se van del PRI. No, ya estaban fuera de él al trabajar para la cuarta. En el buen sentido de la palabra. Desde el pasado proceso electoral de junio del 2021.

                                            Clara Elizabeth Bello Ríos

viernes, 21 de enero de 2022

Entre la verdad y la ficción PERSEGUIR A LA SOCIEDAD Y A LOS COMUNICADORES HA SIDO TAREA COTIDIANA DEL GOBIERNO DE LA 4T. Por Jorge Luis Falcón Arévalo*

 



“Con ciertas personas vale más ser traicionado que desconfiar”.

-Arthur Schopenhauer-

 

Todo inició cuando a los representantes populares, llámense senadores o diputados federales, les integraron sus expedientes detallando los ilícitos cometidos en su “larga carrera” criminal viviendo del presupuesto, desviando recursos económicos y simulando inversiones en obra social, cuando algunos se desempeñaron como alcaldes o gobernadores. Los atraparon. Por lo tanto, están al servicio de la secta de la 4T. Calladitos se ven re monitos. Su largo silencio es proporcional a su culpabilidad y pecados de lesa humanidad.

 

Estos y lambiscones que no pueden vivir de la llamada 15/30 (nómina oficial gubernamental), se pusieron al “servicio” de estos malandros cuatrotés como espías, soplones, delatores. Sapos pues. Para informar de quienes están en contra de la “transformación patriotera” de Morena, el organismo color moronga. Para que su lugar en los honorarios, siga inalterable. ¡Traidores! Le dice el vulgo. Algunos empezaron dándole trabajo a los jóvenes construyendo el futuro, en sus medios impresos y otros en los digitales. Desde allí marcaron su preferencia y su status de sapos. De denunciantes y acusadores. Los más hacen largas alabanzas en sus peroratas de “hombres y mujeres de izquierda”, como sino se supiera que siempre han cobrado desde la derecha. Loas al ego de oficiosos y serviciales periodistas ¡Chismosos!, le dice la raza.

 

“Un traidor, dijo el político, periodista y médico Georges Clemenceau, es un hombre que dejó su partido para inscribirse en otro. Un convertido es un traidor que abandonó su partido para inscribirse en el nuestro”. Eso ha venido sucediendo desde hace tres años en México. Los organismos políticos han hervido con estos seres ingratos y de baja estima que, en su alma canalla, han servido al capataz dándole el látigo para que los azote, con el desprecio de saberlos ingratos e insidiosos. Y, por lo tanto, no poder confiar en ellos. “Quien traiciona una vez. . .”

 

"¿Qué eras", continuó el Sr. Dewey, "una paloma taburete?"

"Les dije lo que sabía".

"¿Para una consideración?"

"No"

-Conversación entre Charles Luciano y Thomas E. Dewey, un cazados de mafiosos. The New York Herald Tribune, 4 de junio de 1936-.

 

Grillos de medio pelo ese es su denominación acepcional -se dicen políticos por participar en la política- pero no, nunca lo serán. La Ciencia Política es para gente noble y de voluntad de servicio. Humilde, (como fundamento de su calidad humana) tal cual lo dijo el periodista y escritor Ryszard Kapuscinski “Una mala persona nunca podrá ser buen periodista”.

Es tiempo de reconvenir y considerar que hay nuevas castas de juventudes que pueden elevar el nivel de política y políticos como de comunicación social y comunicadores para la opinión pública. Emprendedores totales.

 

Una paloma taburete. una persona que actúa como señuelo o informante; especialmente: un espía enviado a un grupo para informar.

Esos grillos para eso sirven, ese es su papel en este entramado, que sirven para los añejos, rancios y arcaicos cacicazgos que no dejan avanzar al México que realmente debemos ser.

La 4T, tiene un ejército de soplones, pone dedo, delatores. 2024, es un año para definir lo que deberá ser México. Seis años perdidos, millones de pesos idos a la basura por el capricho de un inepto y escaso constructor de la política y del orden social. Millones de muertos no tan solo por la irresponsabilidad de enfrentar la pandemia del Covid-19 y sus modalidades o variantes. Un abismo entre la educación y el conocimiento de las generaciones que se perdieron no seis años, sino una década por mediocres personajes que solo el ego los mantiene de pie. Pérdida lamentable entre la infancia estudiosa de México.

La persecución del gobierno federal sigue. Los delatores se mezclan entre los múltiples partidos políticos ¡Uf un asco de hombres y mujeres! Una total prostitución. La 4T, es un fiasco, un fracaso. No hay duda.

 

*sin.marca@gmail.com

www.entresemana.mx

@GradoCero_Gro

 

 

 

 

 

miércoles, 12 de enero de 2022

 

EPÍSTOLAS SURIANAS 

De Julio Ayala Carlos



• Iñaky, y la tragedia de Iguala…

 

AQUELLA NOCHE DEL 26 Y MADRUGADA DEL 27 de septiembre de 2014, el entonces Fiscal General del Estado, Iñaky Blanco, literalmente salvó de la cacería desatada en contra de los normalistas de Ayotzinapa, llevada a cabo por policías municipales de Iguala, a nada más, pero nada menos, que a un total de 68 estudiantes. Siendo justos, este hecho sería más que suficiente para reconocerle su actuación en esa trágica noche. Pero no sólo eso.

 

La actuación de Iñaky Blanco al frente de la Fiscalía, hizo posible que 32 personas, entre mandos policiacos y efectivos de Iguala (un policía está prófugo), fueran consignados por su presunta participación en tan lamentables hechos, y a más de siete años de ocurridos, estos 32 consignados siguen detenidos por más intentos que han hecho para salir libres. El último caso es el de quien fuera secretario de seguridad pública municipal de Iguala, Felipe Flores Velázquez, a quien un Tribunal Colegiado rechazó un amparo por el cual sus abogados pretendían echar abajo el auto de formal prisión dictado en su contra por su presunta responsabilidad en los hechos que dejó como saldo 6 personas muertas, 43 desaparecidos y 25 lesionados.

 

Es decir, el entonces Fiscal General del Estado no solo salvó a 68 normalistas en aquella trágica noche cuando eran cazados como animales, sino que como primera autoridad, responsable de las investigaciones, dejó firmes las actuaciones que, por desgracia, al ser retomado el caso por el gobierno federal, se contaminaron y pervirtieron. Todo ello viene a cuento porque a poco más de siete años de los hechos, y a poco más de tres años del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la aclaración de la tragedia que le dio vuelta al mundo, cada vez se aleja más, pese al compromiso presidencial de resolverlo de forma inmediata.

 

Hay que decirlo con todas sus letras. Al consumirse la mitad del periodo presidencial, parece más que imposible resolver un compromiso de campaña, en razón de que, además de destrozar la llamada “verdad histórica” del anterior gobierno federal que encabezó Enrique Peña Nieto, la nueva verdad que busca el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, acorde a lo que buscan los familiares de las víctimas, se desmorona día a día, toda vez que su testigo protegido ha perdido credibilidad como tal. Así las cosas, a la luz de los hechos, a la luz de las investigaciones realizadas por el gobierno de Peña Nieto, y las que también ha realizado el de López Obrador sobre los hechos de Iguala, lo único que se encuentra firme son las actuaciones que realizó en su momento Iñaky Blanco y que llevaron a la detención de 32 personas, a las que se comprobó su participación en aquella noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014. En ese sentido, no es nuevo decir que, a pesar de que se le ha querido relacionar en el caso como presunto responsable, es el único que puede resolverlo, no sólo porque como Fiscal inició las primeras investigaciones que hoy por hoy son las únicas firmes, sino porque conoce el contexto en que ocurrieron los hechos, de tal forma que, en vez de querer incriminarlo como perversamente lo ha pretendido el abogado de las víctimas de los 43 normalistas, Vidulfo Rosales, deberían al menos tomar en cuenta sus opiniones y observaciones del caso.

 

No es, por supuesto, una ocurrencia como las que diariamente se ventilan desde Palacio Nacional, sino una propuesta que bien vale ser analizada por quienes tienen el compromiso de resolver el caso de Iguala. Iñaky Blanco, habrá que decirlo, no sólo tiene experiencia, sino que además es uno de los profesionistas más respetados en el país en asuntos relacionados con la justicia, además de que, como pocos, tiene capacidad para encabezar una investigación y esclarecer así la desaparición de los 43 normalistas. Ya lo dije.

 

El tiempo se le agota al presidente de la República, porque además, en vez de construir una relatoría a modo, que satisfaga a los familiares de las víctimas, debe esclarecerse aunque los resultados no gusten a muchos. Porque, habrá que puntualizarlo, en aquella trágica noche, los jóvenes atacados en Iguala no estaban en calidad de estudiantes, y eso ciertamente, es un hecho que ya no puede ocultarse. Así es. La verdad puede ser muy cruda. Ése es el riesgo. Y ése es también, el motivo de la tardanza de quienes, a pesar de su compromiso, no se atreven a esclarecer los hechos.

 

EN OTRO ASUNTO, LOS HECHOS DEMUESTRAN que la violencia se ha disparado en el estado. Así se ve y se siente entre el pueblo común y corriente, aunque desde el gobierno estatal y federal, e incluso desde las encuestas pagadas, se diga lo contrario. Algo no está funcionando, y eso que hay un gobierno de “abrazos, no balazos”. OTRO ASUNTO. DE ACUERDO AL PADRE de la gobernadora del estado, es decir, Félix Salgado Macedonio, estamos a días de que el semáfaro epidemiológico en Guerrero retroceda, no a amarillo, que es el color inmediato, sino a naranja, es decir, dos colores atrás. Es decir, estaremos en la antesala de regresar al semáforo rojo, o lo que es lo mismo, en una situación de alarma.

 

Comentarios: epistolassurianas@hotmail.com