Los tiempos de los relevos en los Ayuntamientos municipales, en el Congreso Local, en el Congreso de la Unión y en la Presidencia de la República, deben de servir para hacer un alto en el camino, para invocar seria y serenamente a la reflexión, que conlleva a sacar exitosamente la Administración que se va a tener.
Por hoy, me voy a referir
particularmente, a los municipios de nuestro estado de Guerrero, sin que ello
signifique avistar solamente, situaciones excelsas en los otros entornos
administrativos indicados anteriormente. Así, se puede señalar al municipio
como una célula y por ende, ha sido este, el que siempre está en estrecho
contacto, con los habitantes qué lo conforman, por lo qué, de una u otra forma,
son su gente las qué directamente gozan o sufren con las políticas emanadas
desde el gobierno, las cuáles muchas veces no son distinguidas plenamente por
sus receptores, pero igual, las lamentaciones populares van a parar al
Ayuntamiento municipal, a veces con razón y a veces sin razón.
No obstante,
independientemente de esta peculiaridad, hay una razón muy poderosa, qué limita
enormemente a la gran mayoría de los presidentes municipales qué nos gobiernan,
les impide manifestarse jubilosamente al término del mandato conferido, y es el
de LA TRANSPARENCIA ADMINISTRATIVA Y FINANCIERA. Esta cuestión permea
desafortunada y desfavorablemente en muchos municipios del estado de Guerrero,
aumentando de esa manera el rezago ancestral en qué nos encontramos.
LA TRANSPARENCIA
ADMINISTRATIVA Y FINANCIERA de los Ayuntamientos municipales, pasa
necesariamente por dos aspectos fundamentales y decisivos en el progreso y
desarrollo de los municipios en cuestión: a) Manifestación pública y segura, de
todo el personal administrativo y laboral qué se tiene, y b) Rendición pública
de cuentas, en concordancia con la realidad y con la actitud del jerarca municipal. Con estas dos
condiciones avante en los municipios, serían como una especie de blindaje a todo intento por erosionar los trabajos realizados en un
Ayuntamiento municipal, tanto en el aspecto político, cómo en el ámbito
administrativo,
Hoy en día, hay formas
efectivas de dar a conocer más allá de las fronteras del municipio, los asuntos
relacionados con una pulcritud de los
sucesos de un Ayuntamiento. Antes, en tiempos ya idos, nomás con cumplir un
mandato legal de ofrecer un informe anual de labores, los presidentes daban por
servida esta encomienda. Es justo decir, que aunque ese ritual legal
protocolario se sigue dando como una forma de cumplir con esa representación
contenida en la Ley, las herramientas tecnológicas de comunicación qué existen,
permiten dar la pertinente, oportuna y eficaz información emanada de las paredes del Municipio.
En otros espacios de La
Rueda de la Fortuna, se ha sugerido, se ha aludido, se ha propuesto, la
necesidad de qué en los Ayuntamientos municipales, cuenten con un portal o
página electrónica en Internet, como una forma principal de sacudirse del polvo que pudiera acarrear
los actos propios de la corrupción. Desgraciadamente, todas estas
manifestaciones, han sido escuchadas por el desierto. A lo anterior, habría que
sumarle las Redes Electrónicas, como: Facebook, Youtube y Twiter.
Es obvio qué un Ayuntamiento
municipal con ésta cualidad, de la práctica usual de la Transparencia Administrativa
y financiera, tendrán qué poner en práctica otros valores que tengan que ver,
con una adecuada actitud Presidencial del munícipe de la punta, cómo lo serían: Voluntad, Disponibilidad, Capacidad y Honestidad, básicamente. Sin estas premisas,
es impensable lo dicho en líneas superiores y se seguirán observando,
Ayuntamientos corroídos y destruidos por las malas mañas, las transas, la
impunidad y todo lo qué tenga qué ver con el estado de putrefacción….HASTA
PRONTO.