jueves, 28 de abril de 2022

ZONA CERO Socorro Sánchez y sus llamados a cerrar la FGE Por Roberto Santos


Parece que la Secretaria General del Suspeg le quedó grande el cargo.

No logra tener el control de sus secciones ni de su base sindical.

Eso queda demostrado con las acciones de Socorro Sánchez, quien parece ya inició su campaña para la que sigue.

Es decir, otra vez al quedarse con las ganas de ser ungida candidata a la secretaría general que hora tiene Adelita, Soco desentierra el hacha de guerra y en quijotescas acciones se lanza a pelear supuestamente por los derechos de sus representados.

Soco ahora pretende cerrar la FGE y correr a todos los nuevos funcionarios, desde la Fiscal, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, para abajo.

¿Lo conseguirá?

Sin duda esto tiene en suspenso al gobierno del estado y a la Fiscalía.

¿Será que hasta allá llega el poder de pertenecer al sindicato oficial?

¿O será que esta organización está cada vez más desorientada y con la nueva dirigente, peor aún, como para que cada quien haga lo que quiera?

Socorro Sánchez, pretende que unos cuantos  trabajadores cierren la Fiscalía alegando supuestos abusos en contra de los mismos, cuando tiene la opción de acudir a distintas dependencias para presentar sus quejas de manera legal, no política como pretende hacerlo.

Parece obvio que los ajustes que ha venido a realizar la Fiscal para optimizar el funcionamiento de la dependencia y tratar de erradicar la corrupción, no les ha gustado a algunos trabajadores y es probable que esperaran más de lo mismo.

Pero lo que se sabe es que los cambios y rotaciones de trabajadores van a ser permanentes, y la exigencia de evitar acciones de corrupción, también.


A decir verdad, la lideresa debería presentar pruebas de sus dichos; de esas supuestas violaciones de los derechos laborales de quienes los han padecido, de tal manera que pase del nivel de chisme a cosa seria, para ser tomada en cuenta.

De no presentar pruebas, sus acciones solo pueden ser consideradas como una especie de intento para apanicar a la Fiscal y alinearla a sus objetivos, y parece que será difícil que lo consiga.

Lo que sí debe hacer la sección sindical es aportar sus pruebas de que hay violación de los derechos laborales, de que hay malos tratos, de que hay humillaciones y de que hay despidos injustificados.

Si no es así, la intención de cerrar la FGE solo será una acción injustificada y producto de una acción de marketing político para posicionarse en la mente del sindicalismo oficial como la lideresa luchona por sus agremiados, para ver si en la siguiente elección, ahora sí le toca.