“No se puede tapara el sol
con un dedo”, dicen que dice un dicho popular. “No hay peor ciego que quien no
quiere ver”, dicen que dice otro mas por allá. “El último en enterarse es el
marido”, es otro al que se recurre con cotidiana insistencia. “Te lo dije”,
incluso fue cantado con singular picardía en promocional televisado del IFE.
“Te lo dije”.
¿Cómo no vamos a quitar
solemnidad a los eventos políticos de nuestro entorno? No queda otra al
ciudadano común y corriente que reír a mandíbula batiente ante las pifias,
abusos, obscenidades y cinismo de quienes quieren convertirse en “nuestros
representantes” y manejar como solo ellos saben hacerlo los dineros públicos.
Aquí como allá. Los
políticos domésticos como los de la ciudad de México o los que pretenden la
Presidencia de México. Veamos si no es asi.
1) La semana pasada se publicó en este espacio
que en el PRI la cultura del privilegio expulsó de sus filas a los militantes y
viejos liderazgos al entregar las candidaturas a hijos, sobrinos, esposas y
amigas cercanas, por encima de quienes aun creen en la cultura del esfuerzo en
ese partido. “… Son diputados en el DF. Votaron allá y allá fueron votados,
pero pretenden el Senado por el apellido mismo”, creo que escribimos. Nos
quisieron “regañar” con el argumento del linaje por encima de la opinión. Hubo
una amenaza para cambiar a funcionarios del IEEG por “la osadía” de lanzar una
crítica, como se hacía en el viejo PRI. “No se puede tapar el sol con un dedo”,
podemos sostener.
2) Hoy por la mañana los 25 líderes cetemistas
de Acapulco, entre quienes aparecen nombres de ruizmassiuistas de hueso
colorado, decidieron dar su apoyo a los candidatos de las izquierdas. Con Sofío
Ramírez, Evodio Velásquez y Luis Walton a un lado de ellos, argumentaron:
“nuestro partido se ha convertido en un partido familiar en donde han marginado
a los verdaderos priístas. Han puesto a los hijos, sobrinos, esposas y amigos
en las candidaturas”. ¿Se parece a lo que escribimos? Parece que sí. Podemos
sostener entonces que “no hay peor ciego que quien no quiere ver”.
3) En el ámbito nacional leemos que según las
encuestas difundidas todos los días nos dicen que Enrique Peña Nieto va a la
cabeza de las preferencias electorales y que Andrés Manuel López Obrador ya
mandó al tercer sitio a quien venía segunda, Josefina Vásquez Mota. Todas menos
tres: Berumen, Reforma y María de las Heras. En el año dos mil ésta última fue
la única que pronosticó que Vicente Fox ganaría la Presidencia de la República.
El resto daban el triunfo a Labastida. Entonces se dijo correctamente “El
último en enterarse de la verdad fue Don Francisco”. María de las Heras tuvo
razón en contra de todos los que dijeron lo contrario. Hoy da 4 puntos de
distancia entre peña y AMLO.
4) Los nombres de los candidatos del PRI con
parientes poderosos, famosos e influyentes en Guerrero son, entre otros: en el
senado Claudia es hija del ex gobernador José Francisco Ruiz y el ex presidente
Carlos Salinas; a diputado federal plurinominal va Manuel Añorve y como
diputada local pluri va su esposa Julieta Fernández; otro pluri es el hijo de
Rubén Figueroa Alcocer, Rubencito Figueroa Smutny. Y para el caso de las
regidurías y sindicaturas de Acapulco habrá que anotar a Vicente Trujillo,
Abimael Salgado y Aleida, la secretaria privada de Fermín Alvarado. Aquí
podemos concluir, como el comercial del IFE: Te lo dije. Los cetemistas mas
priístas han decidido irse con los candidaturas de las izquierdas. Otros que
habían regresado como fue el caso de
César Flores, interpondrán recursos ante el Trife; otras viejas priístas
como Rosaura Rodríguez demandaron por la vía penal. ¿hacía falta tanta rudeza?
Nosotros nos quedamos con el pícaro comercial operístico del IFE: Te lo dije.
TRASCENDIÓ
QUE los seccionales del PRI
preparan una revuelta en contra de su candidato a la presidencia municipal de
Acapulco. Les han encomendado mucho trabajo, pero el recurso económico que debe
aterrizar desde su partido hasta la base se quedó en casa de campaña. ¿Creen
que el dia D acudirán por la promesa de una “chamba en caso del triunfo”? Sus
vecinos de las izquierdas ya les guiñan el ojo para llevárselos a su causa.
¿Será que se vayan?
