Pero además, la
intervención del ombudsman guerrerense, también llamado ombudsperson, demostró
que la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG), también
se ocupa de destrabar conflictos que, hay que decirlo, le corresponden a otros
atender y resolver, como por ejemplo, al delegado federal en el estado, Pablo
Amílcar Sandoval Ballesteros, por ser un hecho en el que estaba involucrada la
Guardia Nacional.
En efecto, fue el
presidente de la CDHEG quien logró la liberación de los 16 miembros de la
Guardia Nacional que fueron retenidos en Tecoanapa por integrantes de la UPOEG,
como forma de presión para lograr la liberación de 10 elementos de la policía
comunitaria de esa organización, detenidos el 11 de noviembre en Xaltianguis,
durante un operativo policial para restaurar el orden en esa comunidad
perteneciente al municipio de Acapulco.
Durante 35 horas, los
miembros de la Guardia Nacional estuvieron retenidos por la UPOEG, hasta que el
presidente de la CDHEG, Ramón Navarrete Magdaleno, acudió a Tecoanapa para
mediar en el conflicto y encontrar una solución pacífica, encabezando una
reunión con los líderes de esa organización, en la que escuchó sus
planteamientos, y después de varias horas de negociación, la UPOEG accedió a la
liberación de los 16 elementos de la GN. A cambio, la Comisión de los Derechos
Humanos del Estado se comprometió a establecer una mesa de seguimiento y
acompañamiento a la defensa legal de los comunitarios detenidos, la cual se
realizará el 11 de diciembre en Acapulco.
"Se expondrán algunas
condiciones de atención, se tomarán acciones jurídicas para que los abogados de
la UPOEG lleven a cabo las promociones ante el juez y entren de lleno a la
defensa de sus compañeros", detalló el ombudsperson, e indicó que la CDHEG
les dará acompañamiento y estará al pendiente de los detenidos, quienes se
encuentran en el Centro de Reinserción Social de Chilpancingo.
Así, con el compromiso de
Navarrete Magdaleno, toda vez que hay muestras de que ésta se cumple, los
miembros de la Guardia Nacional fueron liberados, permitiéndosele además que
continuaran con sus tareas cotidianas de seguridad y de apoyo a la población,
como lo informó con oportunidad el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien
reconoció la intervención de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado, y
reiteró su compromiso de mantener el diálogo permanente y trabajar por la paz y
desarrollo de las comunidades guerrerenses.
Hay que decirlo. Un asunto
como la retención de miembros de la Guardia Nacional, que debió atenderlo el
Gobierno federal a través de sus diversas instancias en Guerrero, entre ellas
la que encabeza el delegado federal en el estado, Pablo Amílcar Sandoval
Ballesteros, tuvo que ser resuelto por el presidente de la CDHEG, acudiendo por
supuesto a Tecoanapa, como ha acudido a otros municipios, en donde también ha
resuelto conflictos y liberado a policías de la población, así como a
ciudadanos por conflictos diversos.
Ramón Navarrete, hay que
puntualizarlo, no solo encabeza una férrea defensa de los derechos humanos en
el estado, además de fortalecer la cultura de la prevención de los derechos
humanos de los guerrerenses, sino que además ha convertido a la CDHEG en una
institución que está presente en los conflictos sociales, dando acompañamiento
a los guerrerenses que requieren de su apoyo. Además, hay que decirlo, se ha
convertido en un puente entre la sociedad civil y las autoridades de gobierno
para que, en caso de ser necesario, sean escuchados y atendidos en sus demandas
y necesidades.
Es el caso, sin duda, de
los miembros de la Guardia Nacional retenidos por la UPOEG. Tuvo que ir él para
destrabar un conflicto que le pertenecía al gobierno federal, y más
concretamente a Pablo Amílcar Sandoval, quien
ni siquiera hizo el intento de ir a Tecoanapa. Por eso hay quienes
opinan, y son muchos, muchísimos guerrerenses, entre los que se encuentran las
organizaciones sociales, de maestros, estudiantes, trabajadores e indígenas,
que Ramón Navarrete Magdaleno debe continuar por un periodo más en la CDHEG.
Claro. Hay también quienes
quieren el relevo en la Comisión que encabeza, y más los que aspiran a
sucederlo. Sin duda que son válidas sus aspiraciones, pero, hay que decirlo,
hoy por hoy se requiere en la institución a gente con experiencia probada, que
conozca el tema y a los actores sociales. La buena voluntad y la honradez, no
es suficiente. Se requiere compromiso, trabajo, y ganas de hacer bien las
cosas, y Ramón Navarrete lo ha demostrado, a todos, incluyendo a los diputados
de Morena, y al gobierno federal.
Comentarios:
julio651220@hotmail.com