• Walton, hombre de trabajo y resultados
• En Morena es quien lleva la delantera
EL CANDIDATO A GOBERNADOR
DEL ESTADO POR MORENA, hay que decirlo, si bien tendrán mucho que ver las
encuestas que habrá de realizar ese partido para valorar la aceptación que
tiene cada uno de los aspirantes, lo decidirá el jefe máximo de ese instituto político.
Y es que no solo habrá de contar la popularidad que tengan, sino los resultados
obtenidos en los cargos públicos en los que han estado.
En este sentido, es
indudable que lleva mano el exalcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto, a quien
reconocen, propios y extraños, como quien realizó el mayor número de obras,
transparentado como ningún otro el manejo de los recursos públicos, y de haber
reducido considerablemente la inseguridad pública en el municipio porteño.
Hay que decirlo. Uno de los
problemas de los gobiernos de Morena tiene que ver con quien los encabeza, en
el sentido de que, la mayoría de ellos carecen de experiencia administrativa en
la función pública, y aun y cuando tengan buenas intenciones, caen en la
ocurrencia, la irresponsabilidad o el desconocimiento en el arte de gobernar,
lo que genera la falta de resultados. Por supuesto, hay quienes se salvan de
ello.
Por eso es que Walton
Aburto, un exitoso empresario, les lleva ventaja. Su condición de hombre de
negocios, es un ejemplo de que es bueno en lo que ha hecho. Hay que
puntualizarlo: un empresario no gasta, invierte, y es lo que se requiere en la
función pública para obtener resultados contundentes. Lo demostró cuando fue
alcalde de Acapulco.
En efecto. Un empresario
cuida los recursos, pero no para quedárselos, sino para ejercerlos donde se
requieren a fin de obtener resultados tangibles. Y es que no se trata de gastar
el presupuesto por gastar, sino de obtener los mejores resultados. Un
empresario, también, los maneja con responsabilidad y transparencia, pues sabe
bien lo que cuesta obtener un peso.
Y Luis Walton, como lo hemos
dicho, sabe de ello, y lo demostró cuando fue alcalde del Puerto. Precisamente
por ello, de él se pueden decir muchas cosas, menos de ser corrupto, o de
haberse embolsado el dinero del pueblo. Incluso, como presidente municipal donó
su salario, el cual fue convertido en becas en favor de un gran número de
estudiantes porteños.
En fin. Walton Aburto es un
hombre de resultados. Lo avala su experiencia como funcionario público, pero
también como hombre de negocios. Si lo comparamos con otros aspirantes de ese
partido, como por ejemplo el exdelegado del gobierno federal en el estado,
Pablo Amílcar Sandoval, la diferencia es abismal, e incluso con el senador con
licencia y también exalcalde porteño, Félix salgado.
Es indudable que Morena
busca gobernar el estado, y de acuerdo a las encuestas, sus posibilidades de
ganar son muy altas; sin embargo, también requiere de candidatos capaces,
responsables y con experiencia en la función pública para hacer gobiernos
eficientes y de resultados, a fin de quitarse el estigma de ser un fracaso a la
hora de gobernar.
Hay quienes dicen que en
Guerrero Morena gana con cualquiera de sus aspirantes a gobernador, incluida la
también alcaldesa de Acapulco que, hay que decirlo, su antecesor le dejó un
cochinero, y en consecuencia los resultados de su gobierno allí están. Sin
embargo, de lo que se trata es de hacer buenos gobiernos y eso muy pocos pueden
hacerlo.
Más aún, gobernar un estado,
como lo aspira Morena, el partido del Presidente de la República, implica
responsabilidad, compromiso, entrega y trabajo, pero también conocimiento de lo
que se lleva a cabo a fin de entregar los mejores resultados. Triste, y
lamentable sería que llegara a gobernar Guerrero un irresponsable, un
ocurrente, o alguien que simplemente no conoce el estado y mucho menos los
problemas que aquejan a su población.
Gobernar Guerrero,
puntualizo, significa conocer sus municipios, sus barrios, colonias y
comunidades. Significa conocer a fondo sus regiones, porque las ha visitado y
convivido con su gente, y no sólo de oídas o desde el escritorio. Significa
conocer sus problemas, pero de cerca, no como turista, pero además, tener las
respuestas a las necesidades. Significa también entrega total, no de ahora,
sino desde siempre.
Guerrero, hay que decirlo,
ya no está para experimentos, para aprender a gobernar, para aprender a
trabajar. Guerrero, ciertamente, requiere de resultados inmediatos, y esto solo
pueden darlo quienes han dado muestras de ello. Luis Walton Aburto es un
ejemplo.
Por cierto, no por mucho
tapizar el estado con anuncios espectaculares te hace más trabajador, más
honesto, o un hombre de resultados. En cambio, solo demuestra desesperación y
la urgencia de que te conozcan.
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julio651220@hotmail.com