viernes, 10 de junio de 2022

ZONA CERO La gobernadora no podrá con la inseguridad mientras otros fingen trabajar Por Roberto Santos

 *Rumor de que renuncia la Fiscal

 

Esta noche de jueves pozolero y mezcalero, corre fuerte el run run de que la Fiscal General del Estado ha presentado o va a presentar su renuncia a su cargo.

Las causas no se saben.

Es más, no se sabe si es cierto, pero el rumor está acompañado de que los motivos serían que no ha podido ofrecer resultados ante el incremento de hechos de sangre.

No ha podido realizar las investigaciones ni encontrar los culpables. Esos serían los factores determinantes de tal decisión. 

Es cierto que en el estado y en especial en los municipios de Acapulco y Chilpancingo se han incrementado los hechos de violencia, pero tal parece que los encargados de atender los hechos de violencia y criminalidad han preferido adoptar la actitud de los avestruces y esconder la cabeza bajo tierra para no mirar lo que pasa alrededor suyo.

Vemos pues que le han dejado toda la carga a la gobernadora para ser la que contenga y atienda este clima de zozobra, cuando los ayuntamientos deberían de encargarse de las acciones preventivas y no lo están haciendo como se debe, por eso el discurso de Evelyn Salgado conminando a las autoridades municipales a desarrollar su trabajo y coordinarse con los tres niveles de gobierno.

Y hasta parecer que hay concurso de quien contesta las cosas más absurdas, y la de Acapulco, Abelina López, siempre se lleva las palmas en sus respuestas, como cuando recurrió a señalar a “la calor” como la causa de la violencia en el puerto, omitiendo su responsabilidad en tal fenómeno, aunque en campaña prometió que daría fin a éste.

Pareciera que es cierto lo que la gobernadora señalara, cuando el día martes en Petaquillas detuvieron a los militares y policías del estado, de que había quienes apostaban a que hubiera enfrentamiento, a una salida violenta, pero que ella privilegió el diálogo y el entendimiento para resolver y evitar un derramamiento de sangre.

En ocasiones y esta es una de ellas, a la gobernadora de le percibe sola, pues la Fiscalía no investiga ni detiene a nadie de los que están generando violencia criminal en el estado, más cuando se suponía que traía todo el apoyo de la Sedena. 

Y también se ve que nada va a reducir la violencia y los crímenes en Guerrero si la Guardia Nacional sigue siendo testigo de palo y se dedica a proferir abrazos para evitar lastimar a aquellos que son humanos y deben ser cuidados al extremo para que ni un rasguño reciban.

La gobernadora debe deshacerse de quienes no le ayudan y solo simulan trabajar en materia de seguridad pública.