La
estrategia es más que clara de solo un minúsculo sector
de Morena: Denigrar al gobierno estatal que encabeza el mandatario Héctor
Astudillo Flores. El gobierno de Astudillo, tiene calificación aprobatoria.
Pablo
Amílcar Sandoval, calculó mal, no logró destruir al régimen estatal: Un alud de
críticas negativas se le vinieron encima al siniestro súper delegado federal.
La
guerra sucia de Amílcar, se le revertirá. Quiere ensuciar al gobierno de
Guerrero; utiliza fanáticos, ávidos de poder: Quieren el poder, al costo que
sea.
Los
insultos proferidos en Tlapa por fanáticos –previamente instruidos- hacia el
gobernador Astudillo Flores, fue la revancha de un cobarde que arroja la piedra
y esconde la mano.
En
Tlapa, en lugar de colocar en sillas a los discapacitados-frente al templete
donde estuvo el presidente AMLO-, fueron instalados los llamados “Siervos de la
Agresión”, como porra de la ultra, con consigna: abuchear, insultar y denostar al
gobernador Astudillo.
Frente
a AMLO, se construyó un montaje con tumulto de gente de Morena; radicales que
gritaban denuestos contra Astudillo, para hacer creer que éste tiene un pésimo
escenario y hasta repudio. Falso todo eso.
Astudillo,
como gobernador, tiene calificación aprobatoria no sólo en la montaña sino en
el resto del estado. A los tlapanecos les construyó su ansiado libramiento, más
otras obras y apoyos.
ERROR
DE AMLO: SOMETER A VOTACIÓN.
En
medio de abucheos, el presidente AMLO sometió a votación –a mano alzada- si
Astudillo Flores podía hablar o no. “Empate”, dijo. Hábilmente, Astudillo
Flores dio un discurso corto, y se replegó.
AMLO,
jamás debió someter a votación ante la gente de Morena, si el gobernador
Astudillo debía o no pronunciar discurso.
El
presidente AMLO, debió imponerse y parar en seco a todos los fanáticos
aleccionados por Pablo Amílcar. Por algo es presidente. Dice el dicho: “El que
manda, manda, y no de pendejo se anda…”.
DISCULPAS
DE AMLO, A ASTUDILLO.
Desde
el pasado domingo se difunde un video donde el presidente AMLO ofrece disculpas
al gobernador Astudillo Flores.
“Por
lo que a mí corresponde, le ofrezco disculpas”, le dijo el presidente AMLO al
gobernador Astudillo Flores, al término del evento en Tlapa, ante la presencia
del siniestro Pablo Amílcar.
“No
vuelvo a ningún recorrido, es ofensivo… Si yo no le sirvo, me hago a un lado”,
manifestó el mandatario Astudillo al presidente AMLO, ante la mirada atónita
del delegado Sandoval Ballesteros, señalado de emprender el linchamiento.
REACCIONES,
POR OFENSA A HAF.
El
único ex gobernador que reaccionó favorablemente y reprobó los hechos ocurridos
en Tlapa, fue Ángel Aguirre Rivero; también el líder del partido Movimiento
Ciudadano Luis Walton respaldó al mandatario Astudillo.
De
igual manera, apoya al gobernador Astudillo, el dirigente estatal del PRI,
Esteban Albarrán Mendoza; el Coordinador del PRI en el Congreso, Héctor Apreza;
el senador Manuel Añorve y el alcalde de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán,
entre otros muchos.
Rubén
Figueroa Smutny, festinó la agresión contra Astudillo, a través de su cuenta de
Twitter. El padre de éste hizo mutis al igual que René Juárez y otros
políticos.
AMÍLCAR,
LOBO CON PIEL DE OVEJA.
Tras
los hechos del pasado viernes en Tlapa, el Delegado Federal Pablo Amílcar
Sandoval, ya demostró a lo que viene a Guerrero: A sembrar el odio, el rencor y
la división entre guerrerenses.
Su
primera etapa es: Divide y vencerás; lo puso en práctica, pero aún lo logra
dividir a la población, para sus aviesos fines de poder. Quiere colarse a la
carrera por la gubernatura para el 2021. ¿Golpeando?
¿CAPERUCITA
Y SANTA CLOS?
Pablo
Amílcar, va por una segunda etapa: Utilizará los recursos ($$$) de las
dependencias federales para sus enfermizas ambiciones políticas de poder;
entregará apoyos -caravana con sombrero ajeno-. Se pondrá vestimenta de
Caperucita Roja, pero debajo del ropaje existe un lobo feroz, sediento de
venganza y poder. ¡Aguas!
También
se colocará el traje de Santa Clos: Andará por todo Guerrero regalando
artículos electrodomésticos, programas sociales, enseres, despensas,
herramientas y todo lo que se le ocurra, para aparecer como “gente buena yaltruista” (pre campaña disfrazada), al estilo del más
rancio PRI que critica. Le importa más el clientelismo. Utilizará el aparato
del Estado. Al tiempo.
GOBERNADORES,
DEBEN ACTUAR.
Luego
de los abucheos proferidos por la “ultra” de Morena al gobernador HAF, a los
mandatarios de otros estados no les queda otra: Condicionar al presidente AMLO,
si deben o no estar en sus actos; corren el riesgo de alguna agresión física,
por parte de fanáticos -more-nacos-. Los siniestros delegados son quienes
preparan agresiones; andan engallados.
Pablo
Amílcar, apenas lleva 45 días como “súper delegado”; en ese lapso ya “cosechó”
una lista de agraviados: Javier Saldaña Almazán, rector de la UAGro; César
Núñez, delegado regional federal; Rubén Cayetano, diputado federal; Arturo
Martínez Núñez, diputado local; Marcial Rodríguez Saldaña, ex rector de la
UAGro y el “toro sin tuercas”, Félix Salgado, entre otros muchos más. ¡Zas!
¿Qué
puede esperar el pueblo de Guerrero, con un Delegado Federal como Pablo Amílcar
Sandoval Ballesteros: desquiciado, ambicioso y perverso, que a toda cosa
pretende el poder mediante el enfrentamiento, el insulto, odio y la diatriba?
A
tiempo está AMLO, para remover a “su” Delegado, antes de que siga perpetrando
actos funestos, de los cuales después no vaya arrepentirse… Punto.