• El coronavirus y el semáforo personal
LA NUEVA REALIDAD, COMO
CONSECUENCIA DE LA PANDEMIA, significa, hay que decirlo, que los mexicanos, y
los guerrerenses en particular, tenemos que vivir, y hasta quién sabe cuándo,
con el coronavirus que, ya lo sabemos, es de alto contagio y al menos en el país,
de una gran letalidad, principalmente en los hombres y mujeres de la tercera
edad, de ahí que para evitar su contagio y su posible mortalidad sea el tomar
en serio la prevención hasta que haya una vacuna universal para su control.
En este sentido, habrá que
puntualizarlo, la apertura de actividades económicas, como consecuencia del
semáforo sanitario, lo que implica el que se flexibilice el confinamiento de la
población, no significa, y esto hay que decirlo, el que el coronavirus se haya
domado, y menos aún, que ya no sea un peligro para la salud de los mexicanos.
Ciertamente en Guerrero,
nuestro estado, como en otras entidades del país, el gobierno federal decretó
el color naranja del semáforo sanitario que mide la intensidad y gravedad de la
pandemia del coronavirus, sin embargo, debe señalarse, ello no indica que la
pandemia se haya extinguido.
De acuerdo al semáforo
respecto a la pandemia del coronavirus, el color rojo significa riesgo máximo
de contagio, el naranja significa alto, el amarillo intermedio, y el verde lo
cotidiano o ideal, de tal forma que la posibilidad de contagio todavía es
alarmante, lo que indica que la población debe, o debería, continuar en
confinamiento si las personas no tienen la urgencia de salir a lugares
públicos.
Pero más allá de los
colores del semáforo, es decir, aún y cuando se llegue al verde, que es el
ideal, ello no significa que el coronavirus se haya extinguido y por tanto la
población ya no tiene por qué cuidarse o hacer caso a las medidas de
prevención. Y es que el color naranja, así como el amarillo y el verde,
significa que la posibilidad de contagio ha disminuido, lo que no quiere decir
que no exista.
Es decir, el virus que ha
causado la muerte de más de 30 mil personas en México, y cientos de miles en
todo el mundo, seguirá estando presente entre la población, incluso aún y
cuando exista una vacuna para su control, y un medicamento específico para
combatirlo, por lo que, como hemos dicho desde el principio, hoy y en el
futuro, con la nueva normalidad, tenemos que vivir con el coronavirus.
Hay que decirlo. Y debe
puntualizarse. El color naranja que hoy tiene Guerrero, no significa que la
población haga una vida normal, es decir, que deje de lado las medidas de
prevención para evitar el contagio. Significa, sí, que la población puede
realizar ciertas actividades, pero tomando en cuenta las acciones necesarias
para evitar su contagio.
Sin embargo, siempre hay
un pero…
Y es que si bien hay un
color naranja, o incluso existiera el color amarillo, o el verde, que es el
ideal, no significa, ya lo he dicho, que las medidas de prevención para evitar
el contagio se dejen de lado, y menos, para la población de alta vulnerabilidad,
es decir, los de la tercera edad y quienes padecen enfermedades
crónico-degenerativas, sobrepeso, diabetes, hipertensión e incluso las de
trasmisión sexual, en razón de que éstos serán, con cualquier color del
semáforo sanitario, de gran riesgo.
Es decir, los hombres y
mujeres de la tercera edad, y los que sufren de sobrepeso corporal, diabetes,
hipertensión arterial, VIH, entre otros, seguirán siendo color rojo o naranja
en el semáforo de referencia, y en consecuencia, deben y deberán seguir
haciendo uso de las medidas preventivas si es que no quieren contagiarse del
coronavirus como ocurre ahora.
Así es. Así como hay un
semáforo para los estados, con el que se indica la gravedad de la pandemia,
debe tomarse en cuenta el semáforo de referencia para la población, tomando en
cuenta su edad, en primer término, pero también su condición de salud, e
incluso su condición económica.
Y es que, un hombre o
mujer de la tercera edad, o quien padece una enfermedad crónico-degenerativa,
siempre serán los de mayor riesgo a contraer otro padecimiento, así como
aquellos que por su condición, carecen de las defensas del cuerpo humano para
hacer frente a las enfermedades.
Finalmente, es de gran
gravedad el que la población salga como si nada a realizar sus actividades, como
si el coronavirus ya se haya domado, o mejor aún, extinguido.
Comentarios: julio651220@hotmail.com