A 12 días de que se cumpla
el primer año del gobierno de López Obrador, en México no queda más que una
estela de destrucción democrática, ingobernabilidad, violencia, crimen y
fracaso económico.
No se ha cumplido una sola
de las promesas del candidato más votado y tampoco ha funcionado ninguno de sus
proyectos, programas y acciones de gobierno contra la violencia, el crimen y el
desempleo. No ha bajado el precio de la gasolina y menos han mejorado los
niveles de vida de la población.
En cambio, la economía es
arrastrada a la recesión, el desempleo es de espanto y el número de víctimas
mortales es igual al de una guerra. Además, el grupo en el poder es víctima de
una escandalosa derrota moral que lo lleva a defender, como victoria, la
violación a la Constitución y sus leyes.
Vamos a los fracasos, las
derrotas y los escándalos.
1.- El mayor fracaso
–porque fue la mayor promesa--, es la violencia y el crimen. El primer año de
AMLO terminará con 35 mil víctimas; cifra peor a la de una guerra. Apenas el
viernes pasado Tamaulipas fue escenario de esa guerra y en Michoacán se reportó
una nueva masacre.
2.- Al fracaso de la lucha
contra la violencia criminal sigue el fracaso económico. México terminará con
cero crecimiento del PIB, lo que arrastra otros fracasos paralelos como el
empobrecimiento y una mayor violencia.
3.- Según el INEGI, en 11
meses del gobierno de AMLO se perdieron más de 2.1 millones de empleos, de 4
millones prometidos por el candidato Obrador. En sólo 11 meses se perdió 50% de
los empleos creados por Peña
4.- La violencia criminal
y la estulticia mostrada al derribar el NAIM, provocaron que se perdiera por
completo la confianza para invertir en México.
5.- Luego de la miopía al
tirar el NAIM, se promovieron tres fracasos potenciales; Santa Lucía, el Tren
Maya y la Refinería de Dos Bocas. Esos fueron los últimos clavos en el ataúd de
la economía.
6.- Las venganzas
personales llevaron a López Obrador a destruir el Sistema de Salud pública, hoy
colapsado. En cuestión de meses expertos pronostican un colapso total con miles
de muertos, entre los más pobres.
7.- Igual revancha llevó a
Obrador a colapsar el sistema educativo, lo que privatiza la educación. ¿Por
qué? Porque todo padre, con dos dedos de frente, buscan llevar a sus hijos a
las mejores escuelas, que son privadas.
8.- La depredación
presupuestal y la caída de la calidad educativa también alcanza a las
universidades públicas, condenadas a la miseria económica que, a querer o no,
se traducirá en miseria educativa.
9.- En materia económica
apenas empieza a verse la devastación; La inversión pública cayó 14 %; la
inversión privada poco más de 13%, en tanto que la inversión extranjera directa
se desplomó 34 %. Fracaso total; pobreza, desempleo, hambre, enfermedades y más
violencia.
10.- El consumo
retrocedió, según el INEGI, por primera ver en la última década, otro signo del
desempleo y empobrecimiento social.
11.- Pero no es todo. Las
tres ramas industriales que jalan el desarrollo económico se desplomaron; la
industria automotriz cayó 8%, el turismo 2%, la industria de la construcción
casi 30%. Sólo por citar tres casos.
12.- El gobierno de AMLO
no sólo fracasó en contener la violencia y el crimen; no solo destruyó la
economía, la salud y la educación sino que, sobre todo, destruye la democracia.
Acabó con la división de poderes y hoy tiene en un puño los Tres Poderes de la
Unión; Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
13.- Además, de manera
ilegal, colonizó organismos autónomos como la CRE y la CNDH y va por el control
total del INE y el Tribunal Electoral.
14.- En sólo un año, López
Obrador ha destruido más instituciones que ningún presidente; desmontó partes
fundamentales de la democracia mexicana y avanza, con pasos agigantados, a
instaurar el poder de un solo hombre.
15.- Eso sin contar con la
derrota moral de AMLO y su gobierno. Y es que sin pudor, desde Obrador, sus
secretarios de Estado y legisladores, violan todos los días la Constitución y
sus leyes sin contrapeso alguno.
16.- Pero López Obrador
tampoco cumplió una sola de sus promesas de campaña; no bajó el precio de los
combustibles, sí usa guaruras, no vende el avión presidencial, no crear cien
universidades, no crear 4 millones de empleos y no crece el PIB en 6%. Y, a
causa del desempleo las afores pierden más de 10 mil millones de pesos en sólo
11 meses.
A un año de gobierno, que
se cumple en 12 días, ya no hay duda que el de López Obrador es el gobierno del
fracaso; el peor gobierno de la historia y que no sólo nos lleva a la ruina
económica sino a la barbarie de la violencia y, sobre todo, a la ruina moral y
al gobierno autoritario de un solo hombre.
Y eso, aquí y en China, se
llama dictadura.
Al tiempo.