martes, 21 de julio de 2020

EPÍSTOLAS SURIANAS / (Carta a Don Héctor) De Julio Ayala Carlos

      Batalla intestina en Morena…

 

IGUAL QUE EN EL PRD, EN SUS INICIOS, EL PLEITO EN MORENA está a punto de desbordarse, y afirman algunos en ese partido, no sin preocupación, que los manotazos por las candidaturas, y en especial la de gobernador del estado, puede llegar hasta el derramamiento de sangre, lo cual no sería nada extraño como parte de la pugna entre los grupos políticos y de poder.

En efecto, en los últimos tiempos nunca se había visto en la política guerrerense una batalla intestinal tan intensa, como la que se vive en Morena, el partido del Presidente de la República, por la candidatura a la gubernatura del estado. Ésta que se está viviendo en Guerrero, nunca se había registrado en un partido político local, salvo en los inicios del PRD, también por las candidaturas.

Ciertamente, hay que decirlo, en los inicios del PRD ocurrió igual, o mejor dicho, cuando empezaron a ganar alcaldías y diputaciones. Los pleitos entre los grupos y liderazgos eran en verdad una cena de negros, tanto que incluso llegaron a los golpes, y no pocas veces se utilizaron otros métodos para quitar de en medio a su o compañeros de partido.

Y es que el PRD, al igual que hoy Morena, más que un partido político era un movimiento con líderes, seudolíderes y seudocaudillos, los que, unos y otros y otros reclamaban lo que a su entender les correspondía. “Fue una lucha intestina que incluso cobró vidas”, dicen hoy en autocrítica, algunos perredistas, quienes señalan que fueron precisamente esos líderes, esos caudillos, los que le hicieron mucho daño al incipiente partido.

Hoy algunos de esos líderes y presuntos caudillos, están en Morena, en el partido del Presidente.

No extraña pues, puntualizan, lo que hoy ocurre en Morena. El cáncer que tuvo en su momento el PRD, está en Morena, a donde emigraron, cuando en el sol azteca dejaron de tener el poder.

En fin. Lo cierto es que el pleito que ocurre en Morena, principalmente por la candidatura a gobernador, apenas comienza. Y va para largo, con el peligro de que la sangre llegue al río. Y es que suponen que todo se vale con tal de llegar al poder, al cargo de gobernador.

Es cierto. Hoy por hoy Morena tiene cierta ventaja, electoralmente, respecto a otros partidos políticos, todavía por el arrastre de López Obrador, según señalan algunas encuestas, y por eso es que ese partido, que sigue siendo un movimiento, tiene hoy el mayor número de aspirantes a gobernador del estado.

Por eso es que están apuntados Félix Salgado Macedonio, quien hasta hace dos años era un cadáver político; por eso es que también se apunta Pablo Amílcar Sandoval, un sujeto gris que su único mérito es ser hermano de la secretaria de la Función Pública, y en la misma lista se encuentra Luis Walton Aburto, exdirigente nacional de MC y amigo y compañero de lucha del hoy Presidente de la República.

De igual forma, también se menciona a la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, quien está ocupada en resolver los problemas de los acapulqueños y los entuertos que le heredaron, y también amiga de López Obrador. Precisamente también por eso es que el exalcalde Alberto López Rosas hace su roncha recorriendo el estado en franca campaña, y aunque hoy está encamada, Nestora Salgado, excomandante de la policía comunitaria de Olinalá, acusada de secuestro y hoy senadora de la República, dice yo también quiero.

El poder es el poder, dicen quienes lo han tenido. Se llega incluso hasta el homicidio, puntualizan, al comentar la campaña de estiércol al interior de Morena por la candidatura a gobernador.

Y no entienden   que en ese partido el hoy el Presidente será el que al final de cuentas decida primero, el género de la candidatura, y en función ello, el nombre de quién habrá de ser el que aparezca en la boleta electoral, en donde tiene muchas posibilidades de colarse Beatriz Mojica Morga, si se concreta la alianza Morena-Verde-PT.

Todo ello, sin que aún inicie el proceso electoral. Mientras tanto, el pleito es encarnizado. El poder es el poder, y muchos traen hambre atrasada de ello.

La división, pues, está en puerta en Morena. Por ahora se acusan de todo. Hasta de corruptos y bandidos. Unos lo son, con casas y riquezas mal habidas o de dudosa procedencia, otros, aún no.

 

Comentarios: julio651220@hotmail.com