Si
bien es cierto que el senador Juárez será pieza fundamental para cohesionar a los
grupos políticos que operan dentro de su partido, también es cierto que tiene
que hacer una labor hacia otros grupos sociales que no están debidamente
enmarcados en los demás institutos políticos para lograr atraerlos a su órbita
y cuando menos incrementar el número de simpatizantes para enfrentar con mayor
holgura la competencia electoral que se avecina y que no está nada exenta de
complicaciones dentro y fuera del priismo.
La
lectura que debe tener el senador Juárez sobre las posibilidades que tiene ahora
y en el futuro cercano su partido de lograr triunfos más allá de sus consabidos
enclaves territoriales, tiene que estar sustentada en hechos reales, en las
incapacidades de sus adversarios políticos en el poder de haber logrado atender
las demandas populares y de haberse sumido en actos que hoy por hoy no admiten
los ciudadanos como son, entre otros, el abuso de poder, la demagogia, la
ausencia de transparencia, el incumplimiento de promesas, la incapacidad para
otorgar seguridad pública y seguridad jurídica, la ausencia de procuración de
justicia, la corrupción y el uso de
recursos públicos para alentar campañas políticas anticipadas, etc, etc.
Si
bien es cierto que en los meses que lleva como delegado general del CEN del PRI
en Guerrero el senador René Juárez Cisneros, ha preferido mantener un bajo
perfil frente a los medios masivos de comunicación, no quiere decir que no ha
desplegado una intensa actividad política, sin dejar de atender su cargo como
legislador y frente al cúmulo de reformas constitucionales en el 2013 y las
revisiones y debate de las leyes en materia secundaria de dichos cambios habidos
en la carta magna.
Para
algunos políticos guerrerenses, la batalla por los puestos de elección popular
para el 2015 todavía tienen mucho tiempo por delante, aunque esta premisa no la
comparten muchos compinches pues ha habido y todavía los hay, quienes no solo
han iniciado de madrugada sus actividades proselitistas que les originaron una
serie de reproches públicos interesados y de instituciones electorales que los reconvinieron para retirar su
propaganda que habían colocado a lo largo y ancho de la entidad.
Los
políticos que están más que acelerados no son solo del PRI, como el alcalde de
Chilpancingo, Mario Moreno Arcos sino también el diputado federal del PRD,
Sebastián de la Rosa Peláez, pero igualmente se incluyó en esta lista al
mismísimo rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Javier Saldaña Almazán
y al senador del PRD, Sofío Ramírez Hernández.
Pero
como en Guerrero las instituciones electorales están muy desvaloradas por su
erróneo actuar frente a los abusos de los políticos al desatender obligaciones
enmarcadas dentro de la legislación respectiva, las advertencias de ser
sancionados no pasa de ser un acto más de moralidad política que de sanción
administrativa.
En
este escenario de fragilidad institucional, estará enmarcada la próxima
contienda electoral, aún y cuando habrá que observar con lupa los cambios que
ocurran con las leyes secundarias de la reforma política que se aprobarán en breve
en el Congreso de la Unión y en donde entrará con nuevas atribuciones el
renovado Instituto Nacional Electoral que sustituirá al reconocido IFE.
Como
todos sabemos, los cambios que se harán en función político electoral, han sido
observadas con detenimiento por los legisladores federales y por ende, el
senador Juárez tendrá claridad sobre las formas como se deberá actuar para no
incurrir en faltas legales y tener cuidado en que quienes pretendan ser
candidatos a los puestos de elección popular que estará en disputa sean los más
idóneos y los que no solo convenzan a los cuadros del tricolor sino que tengan
frente a la sociedad en general una imagen positiva y tras ello una labor que
sustenten sus aspiraciones por dirigir o representar a los electorales.
La
situación en Guerrero para el PRI está harto complicada. Tiene muchos
aspirantes a la gubernatura del estado, pero la mayoría han sido ya observados
y votados por la sociedad guerrerense. Las pocas figuras públicas que podrían
competir para esta posición son menos de la mitad de los dedos que tiene una
mano, lo cual prefigura una alta dosis de contención y convencimiento de los
grupos que respaldan a figuras desteñidas por su uso constante en competencias
electorales.
No
es menor el encargo que le hizo el CEN del PRI al senador Juárez. Pero también
se puede decir que no es imposible que éste pueda lidiar bien y con éxito este
complicado asunto, pues es conocido y reconocida su capacidad para llegar a
acuerdos y quizás tenga hasta un as bajo la manga, pues no se olvida que René
Juárez Cisneros fue el gobernador constitucional del PRI que recibió de manos
del gobernador interino, Ángel Heladio Aguirre Rivero, la administración pública
estatal y conoce a fondo los pros y contras de la forma como el actual gobernador
Aguirre hizo uso de las finanzas estatales. No hubo revanchismo y por ende la
deuda política está vigente.
Frente
a lo que podría ser el panorama de la oposición, el delegado general del PRI en
Guerrero, sabe bien de que pie cojean los adversarios y sobre todo, por su
experiencia personal, sabe que hilos mover para obtener ventajas electorales.
Si
bien es cierto que la sociedad guerrerense hoy es más demandante y más
acuciosa, también es cierto que a esta sociedad habrá que hablarle con claridad,
sin tapujos, sin concesiones para la oposición en el poder y por ende, habrá
que asistir a una ruptura acordada con quien es hoy por hoy un gobernador
priista representando al perredismo.
No
olvidemos que el mismísimo senador Juárez dijo en alguna ocasión y fue retomado
por los medios de comunicación que ‘’el gobernador Aguirre solo está prestado
por el PRI al PRD’’. Palabras más, palabras menos, pero el caso es que esta advertencia
está a punto de confirmarse.
Por
lo tanto, el candidato del PRI al gobierno del estado, no solo será apoyado por
los priistas tradicionales, los nuevos tricolores que alcance a pescar el
senador Juárez en estos tiempos, sino que también tendrá el apoyo incondicional
de la administración pública estatal con el clásico regreso del ‘’hijo
pródigo’’ a las huestes del tricolor, máxime cuando el gobierno del presidente
Enrique Peña Nieto ha dejado pasar algunos errores que en otras entidades
(Michoacán) han sido seriamente castigados por la federación.
Lo
cierto es que si los aspirantes al gobierno de Guerrero no hacen lo suficiente
para poder lograr una posición privilegiada frente al electorado estatal,
podrían surgir nuevas formas de posicionar al PRI y lograr recuperar esta
entidad hasta ahora contraria a los intereses del gobierno de la República.
René
Juárez Cisneros es el operador político mejor posicionado en la entidad y tiene
el reconocimiento de propios y extraños, lo cual lo colocan en una posición de
privilegio ante el propio CEN del PRI.
Periodista/Analista Político*