jueves, 3 de abril de 2014

INQUIETANTE AVANCE PERMITE A CIENTÍFICOS LEER EL CEREBRO Y RECONSTRUIR LAS IMÁGENES QUE VEMOS.


Por fin se ha logrado lo que por años han buscaron los científicos del cerebro, reconstruir los rostros que vemos analizando la actividad del cerebro. Se empieza a despejar el camino que hará posible leer y grabar lo que las personas imaginan.
Un equipo de investigadores de Yale ha dado un impresionante paso adelante en el conocimiento del cerebro. Este inquietante avance permite a los científicos utilizar una máquina de resonancia magnética y un algoritmo para reconstruir visualmente caras vistas por sujetos de prueba. Como vemos abajo, esta técnica arroja resultados con un impresionante nivel de exactitud. Extrañamente, estos resultados parecen ser posibles específicamente porque el cerebro procesa los rostros de una manera distribuida. 
Desde que los científicos del cerebro encontraron nuestro procesador visual (el lóbulo occipital) han intentado leer e interpretar su actividad para reconstruir datos visuales. Razonaban que un modelo suficientemente detallado de cómo cada “pixel” que vemos se representa en el cortex visual permitiría una reconstrucción uno a uno de cada aspecto de una imagen, sin embargo eso sólo es parcialmente cierto.
Cuando vemos imágenes como edificios o muebles, objetos simples y no emocionales, vemos sobre todo con nuestros ojos. Pero cuando vemos un rostro humano, vemos tanto con nuestro cerebro visual como con nuestro cerebro emocional, y vemos a través de los lentes de la confianza, la seguridad, la atracción sexual, etc.
Inquietante avance permite a científicos leer el cerebro y reconstruir las imágenes que vemos.
Para dar cuenta de esto y poder ver lo que los participantes vieron, el equipo redujo una serie de fotos de prueba a una lista más pequeña de Eigenfaces, mapas faciales simplificados que cubrían la mayoría de las variaciones en las caras de prueba, a pesar de ser bastante menos numerosos y complejos. El programa entonces grabó e hizo referencias cruzadas de los patrones de excitaciones neurales en respuesta a sus Eigenfaces, y tomó estas lecturas de respuestas dentro y fuera del lóbulo occipital. Cuando los “rostros de prueba” experimentales fueron mostrados a los mismos participantes, su respuesta neural fue reconstruída para generar una nueva Eigenface mejor ajustada.

Esta investigación utilizó escáneres IRMf (Imagen por resonancia magnética funcional), que detectan la excitación neural en tiempo real. Los resultados son la primer lectura directa de información visual fuera del cortex visual, y como se puede ver en la imagen superior, provee poderosos resultados. Ambas construcciones, la occipital y la no-occipital, son inferiores a la imagen que concentra toda la información cerebral. Viendo áreas como el cortex temporal ventral, esperan tener una visión más detallada de la percepción que nunca antes. La tecnología apunta a leer las imágenes en el ojo de tu mente como opuestas a las vistas simplemente con tus ojos físicos.