Reconozco que yo fui una
de las personas que tomaron a broma las aspiraciones a gobernar mi México lindo
y querido, que todo era un simple chacoteo politioide…pero cuando chequé el
dato de que la ex Primera Dama comenzaba a padecer el chincuale querreque en
serio no pude menos que expresar ¡Hijoelagua!. Claro, no contaba con que el
Énfant Terrible blanquiazul, le iba a meter zancadilla toda vez que también
anda desde endenantes contagiado de suspirancia.
Aunque la neta, pocos
compitas dudaban de que entre Margarita
Zavala y el actual líder nacional del blanquiazul, Ricardito Anaya, se
rompieran sus respectivas tazas y cada uno agarrara monte pa’ su casa, para otros
tantos era algo que ya veían venir.
Y es que bueno, Richie boy
no solamente comenzó a leudar la masa del PAN sino que de plano le puso las
peras a 25 a la esposita de don Jelipe, quien en alguno de sus momentos de
lucidez, de seguro en más de una ocasión le recomendó a la dueña de sus
quincenas ‘’Cuídate de la levadura del fariseo canalla’’.
El caso es que se se
aventaros sus tiritos, no se pusieron de acuerdo y doña Márgara se convierte en
un elemento de ruptura del ya tan desgastado partido blanquiazul. Claro,
representa también la imagen del fracaso
de Calderón por perpetuar su poder en el partido que lo llevó a ser inquilino
de Los Pinoles.
También hay que decir que
en histrionismo le da las 20 y las malas a la esposita de don Enrique Peña
Nieto, que fuera protagonista de varios teleculebrones telenoveleros en el
Canal de la Estrellas Estrelladas. ¡Que tremebunda actuación para pronunciar su
discurso de despedida. Neta, ya nomás faltó que se hiciera acompañar de un
Mariachi para que al término del speech se sorrajara cantando aquello de ‘’La
barca en que me iré, lleva una cruz de olvido’’.
La chispada de doña
Márgara provocó no solamente el aplauso
pejejiano, quien no desperdició la oportunidad de tirarle harto calor a Richie
Boy, sino regocijo pricolor y ñáñaras izquierdosas.
La cosa se pone buena y se
pondrá mejor a la hora que empiece la desbandada panista. En vía de mientras me
remonto a aquellos libros de texto en los que practicábamos lectura hace un
titipuchal de años en el primero de Primaria, y una de las lecciones comenzaba más o menos así ‘’El panadero hacia
pan, pan de dulce pan de sal, rosquitas para los niños que los veían hacer
pan’’…sin embargo, el PANadero mayor sabe que ahorita el horno no está para
bollos, que la que se fue a la villa perdió su silla y que hoy por hoy en el
blanquiazul nomás sus chicharrones truenan.