El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Delegación Guerrero reiteró a la población no bajar la guardia ante el inminente calor y evitar una deshidratación, por lo que insiste en la importancia de consumir al menos dos litros de agua potable al día y tener una buena higiene de manos y con los alimentos que se consumen.
Cuando se registra diarrea, vómito o sudoración, es cuando el organismo inicia un proceso de deshidratación, la cual puede llevarnos a una descompensión y problemas de salud mayores como unshock y hasta la muerte, alertó el Seguro Social.
El coordinador clínico de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 9 del IMSS en Acapulco, Jesús Gante Rodríguez, detalló que la deshidratación se identifica como un trastorno que ocurre cuando una persona pierde más líquidos que los que ingiere, esto puede ser en forma de orina o sudor.
Esto puede suceder cuando el paciente no bebe una cantidad suficiente de líquido o cuando pierde más líquido corporal que lo habitual; este desequilibrio provoca la deshidratación. Uno de los factores que favorecen a la deshidratación son el cambio de clima y la falta de consumo de líquidos.
Explicó que la sintomatología “es muy marcada” en menores de cinco años de edad y adultos mayores, por lo que se debe tener excesivo cuidado para evitar la deshidratación.
En los niños, indicó que un signo de alerta que la deshidratación es cuando lloran sin lágrimas, orinan en pequeñas cantidades, están muy irritables y con la piel flácida y pulso bajo.
Cuando se registra deshidratación por diarrea, explicó el médico del Seguro Social, es cuando el paciente tiene más de tres evacuaciones abundantes liquidas. Recomendó que de forma inmediata se le ofrezca un sobre de Vida Suero Oral, y acudir lo antes posible con el médico familiar para su revisión y atención oportuna.