Desacatar la ley, hacer política con base en amenazas y rodearse con gente igual o peor que él, es lo que distingue desde hace más de tres décadas a Félix Salgado Macedonio, ex candidato de Morena a la gubernatura de Guerrero.
Cuando le conviene presume a sus
fanáticos seguidores que respeta la ley. Lo cierto es que es un soberano
mentiroso y un mal perdedor.
La tarde de este martes y después de que el Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación (TEPJF) ratificara cancelarle la candidatura como
candidato al gobierno de la entidad, desde Chilpancingo volvió a lanzarse
contra los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y los magistrados
del TEPJF, a quienes tachó como “estos malandros” y adelantó que convocará al
Congreso de la Unión para que dichas instituciones “no existan nunca más”.
El pasado 14 de abril se había comprometido en que respetaría la decisión
del TEPJF. Y mintió.
“Respetaremos lo que el Tribunal Electoral decida. Es un compromiso con la
democracia y con nuestra Patria. La 4T avanza sin descanso. Ya tenemos entumido
nuestro cuerpo, sólo estamos avanzando con el corazón. Gracias México por tu
apoyo. ¡Hay toro!”, dijo en ese entonces a través de Twitter.
Mentir es el recurso más fácil que
Salgado Macedonio tiene para convencer a sus seguidores y a uno que otro
ingenuo que sigue creyendo en eso que ridículamente llaman Cuarta Transformación.
Algunos expertos en psicología refieren que el hábito de mentir se puede
transformar en un trastorno de la personalidad llamada “seudología fantástica”,
que es una compulsión a imaginar una vida, unos acontecimientos y una historia
en base a causar una impresión de admiración en los espectadores.
Desde 1993 ha buscado gobernar a los
guerrerenses, lo cual es un derecho
legítimo que tiene. El problema del oriundo de Las Querendas (localidad ubicada
en el municipio de Pungarabato) es que pretende
llegar al poder a través de mentiras y constantes escándalos.
La seriedad no es lo suyo. Por lo tanto, no
es un político confiable.
El pueblo de Guerrero requiere un
proyecto serio de gobierno para los próximos seis años y no un proyecto de
ocurrencias.
Qué bueno que la mayoría de los magistrados de la Sala Superior del TEPJF (6
de 7) hayan confirmado la decisión del INE y cancelado en definitiva la
candidatura de Félix Salgado a gobernador de Guerrero por Morena, toda vez que cometió una conducta dolosa, al no
presentar un informe de ingresos y gastos de precampaña.
Ojalá los dirigentes de dicho instituto político si acaten la ley y
registren dentro de las próximas 48 horas al sustituto de su impresentable
“Toro”.
Morena tenía mejores prospectos para la gubernatura, pero es entendible que se la haya jugado con un
enemigo declarado de las leyes y las instituciones del Estado.
Atacar al INE y al TEPFJ por cumplir
con lo que mandata la ley, hacen ver muy mal a Morena y a sus dirigentes.
Olvidan que el INE es producto de
muchas décadas de lucha democrática en las que se ha ido consolidando como un
árbitro autónomo y confiable, gracias al cual, existe alternancia en
México, lo que le permitió a Morena llegar al poder en poco tiempo.
Ningún mentiroso y provocador tiene
el derecho de imponer sus caprichos a través de la fuerza y las amenazas.
Los guerrerenses merecen elecciones pacíficas y no un ambiente de
violencia, porque la democracia no
depende de un solo hombre, mucho menos de un personaje violento y
obsesionado con el poder.
Y como bien lo dice el ex senador de la República y actual diputado local
del PRD, Celestino Cesáreo Guzmán:
“El ex candidato Félix Salgado Macedonio y Morena deben respetar el fallo
del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de retirarle la
candidatura.
“No se debe utilizar a sus seguidores en representación de todos los
guerrerenses. Los tribunales han dicho la última palabra y deben acatarla.
Decir lo contrario es sumamente irresponsable.
“Las equivocaciones se pagan, y en
este caso, con la pérdida de la candidatura”.
Por cierto, hasta antes de la sesión que encorraló a Salgado Macedonio,
todavía había quienes decían “Hay Toro”. Pero las cosas han cambiado, hoy se
escucha decir: “¡Ay, Toro!”. ¡Zas!
ENTRE OTRAS COSAS… El pasado sábado 24 de abril arrancaron campañas para
alcaldes en 80 de los 81 municipios de la entidad (Ayutla de los Libres lo hará
como en 2018: por usos y costumbres).
La pelea se centrará en Acapulco,
Chilpancingo, Zihuatanejo, Taxco, Ometepec, Chilapa y Tlapa.
La coalición PRI-PRD aventaja en la mayoría de los municipios con más
electores de la entidad, lo cual favorece también a Mario Moreno Arcos, el abanderado de dicha coalición a la
gubernatura.
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