* Capitalinos, habitantes
de todo el estado y turistas, disfrutaron de este evento, que anuncia la
edición 189 de la Feria de San Mateo, Navidad y Año Nuevo en Chilpancingo, la
más antigua del país
* El gobernador Rogelio
Ortega Martínez hizo el recorrido, al que asistieron miles de personas
* Nuestras tradiciones son
el camino para lograr la paz, la gobernabilidad democrática y la armonía que se
anhela en el estado, recalcó el mandatario
Chilpancingo se despertó
temprano. Los capitalinos, al igual que los guerrerenses y turistas se
alistaron para la acudir a la festividad más importante de esta ciudad y la más
añeja de todo el país.
Al comenzar esta
celebración, iniciada en 1825, la concentración masiva tuvo lugar en la calle
Miguel Hidalgo y minutos después de las 11 de la mañana se encontraron los
primeros contingentes, con lo que arrancó la caminata por los barrios tradicionales
y colonias aledañas.
A lo largo del trayecto,
se pudo constatar que a pesar de la situación que prevalece en Guerrero por
hechos recientes, se vivió un clima de paz y armonía, de convivencia y
tranquilidad.
Las bandas de música de
viento amenizaron el recorrido en el que tuvieron representación las siete
regiones del estado, con legendarias danzas como Los Tlacololeros, Los Diablos,
Los Manueles, Los Tecuanes, Los Palomos, Los Gachupines; Los Moros, Los
Zopilotes, Los Tejones, Los Pescados, entre otras tantas que han dado renombre
a Guerrero a nivel nacional e internacional.
Al son del zapateado y la
chilena costeña, el desfile fue abierto por la burra que carga las castañas con
mezcal, los estandartes del Pendón y de Chilpancingo, la Señorita Flor de Noche
Buena 2014-2015, Lucero Chávez y enseguida las autoridades estatales y
municipales.
Niños, jóvenes y adultos,
algunos sentados en sillas, banquetas e incluso arriba de las azoteas, buscaron
el mejor ángulo para disfrutar de esta majestuosa fiesta popular que une y
hermana a los guerrerenses.
El contingente encabezado
por el gobernador Rogelio Ortega Martínez y el presidente municipal, Mario
Moreno Arcos, bajó hasta llegar a la calle 5 de Mayo, pasando por la Nicolás
Catalán para después tomar la avenida Benito Juárez. Ahí ya eran esperados con
agua y frutas cítricas para aminorar el calor.
Después vino la calle
Pedro Ascencio para luego arribar a la avenida Miguel Alemán, la Juan Álvarez
hasta Cristóbal Colón, Ignacio Manuel Altamirano y Heroínas del Sur, con
dirección a las instalaciones de la Feria y la Plaza de Toros Belisario
Arteaga.
Acompañado de su esposa,
Rosa Icela Ojeda Rivera; del presidente del Patronato de la Feria, Hugo Bunichi
Hayashida Estrada, funcionarios del gabinete estatal y miembros del Cabildo
capitalino, Rogelio Ortega estrechó la mano de quienes se acercaban y saludó a
los que se encontraban a lo lejos, en las casas o banquetas de las avenidas.
Más tarde, en entrevista
con reporteros, el gobernador de Guerrero resaltó la mesura y tranquilidad con
que se desarrolló el Paseo del Pendón. “Este es el Paseo de la paz”, destacó
con algarabía.
El cansancio se notaba en
los rostros de los danzantes, pero ni esto, ni el sol incesante que iluminaba
la capital, ocasionaron que su ánimo disminuyera, dando muestra de la riqueza
cultural y las tradiciones de sus regiones de origen, y de todo el estado de
Guerrero.
A las dos de la tarde, el
contingente ingresó a las instalaciones de la Feria y enseguida se dirigieron a
presenciar el Porrazo del Tigre, en la Plaza de Toros Belisario Arteaga.
Con este festejo se
comprobó que las costumbres en el estado, “siguen vivas y que la cultura y las
tradiciones, son el camino para lograr la paz, la gobernabilidad democrática y
la armonía que anhelan los guerrerenses”, enfatizó Ortega Martínez.