ESTE JUEVES, EL DOCTOR
JAVIER Saldaña Almazán rendirá protesta, por segunda vez, y de manera
consecutiva, como rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro). Con su
nuevo rectorado, la máxima casa de estudios del estado inicia una nueva era, en
la que la academia, la investigación y la inclusión social, tienen preferencia.
Es cierto. No a todos
gusta la reelección en la UAGro. Eso es normal, como normales eran, hace
algunos años, las marchas, huelgas y plantones que encabezaba la universidad.
Si en aquel momento el proyecto de Universidad Pueblo era el que requería la
institución, hoy por hoy, lo que requiere, y el estado en general, es una
máxima casa de estudios que a través de la academia y la investigación
científica coadyuve en el desarrollo económico y social de la entidad.
Hay que decirlo. Al ser la
Universidad Autónoma de Guerrero la institución por excelencia del estado, está
llamada a ser factor de cambio, ya a través de la academia y la formación de
profesionistas del más nivel, ya a través de la investigación y divulgación de
la ciencia, o a través de la inclusión social y su participación directa en
asuntos de interés general.
En consecuencia, la
reelección de Javier Saldaña en el cargo de rector, después de ser consensada
por los propios universitarios, o mejor dicho, la mayoría de éstos, y que
posteriormente fue aprobada por el Congreso del estado, tiene que ver con esta
necesidad, es decir, con la continuidad del proyecto académico y de
investigación, vinculado con la parte social, que se viene impulsando de manera
decidida desde hace escasos años.
La UAG, hoy UAGro, hay que
decirlo, ha pasado de ser una institución educativa con un escaso nivel
académico, a ser la mejor y principal del estado, de tal forma que se encuentra
y compite ya con otras instituciones de primer nivel. No en vano la universidad
Autónoma de Guerrero ocupa hoy la presidencia del Consorcio de Universidades de
México (Cumex) y la mayoría de sus unidades académicas están certificadas.
En suma, la UAGro hoy, con
la relección de sus autoridades, encabezadas por Javier Saldaña Almazán inicia
una nueva era.
EN OTRO ASUNTO, QUE
TAMBIÉN tiene que ver con la educación del estado, la sección 14 del SNTE que
encabeza el recién elegido secretario general de ese sindicato de trabajadores
de la educación, Javier San Martín Jaramillo, lleva a cabo “una planeación
estratégica bien definida de acciones que estarán enmarcadas en el proyecto del
Programa Operativo Anual 2017 y que beneficiará a todos los trabajadores de la
educación del estado de Guerrero”.
En este sentido, el Taller
“Habilidades para la Gobernanza, Prospectiva y Visión Estratégica de Futuro”,
dirigido a integrantes del Comité Ejecutivo de la Sección 14 del SNTE, tiene
por objeto hacer de este organismo sindical un instrumento a favor de
fortalecer las acciones en materia de educación en el estado.
Cabe señalar que el
proyecto del Programa Operativo Anual de la sección 14 del SNTE será presentado
en los próximos días a la dirigencia nacional para ser analizado, enriquecido y
avalado por el comité ejecutivo nacional que encabeza Juan Díaz de la Torre,
“en beneficio del magisterio guerrerense, y el cual estará enmarcado por los 32
programas y ejes estratégicos que rigen la vida del Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Educación”.
Durante dos días, los
miembros del Comité Ejecutivo Seccional fueron capacitados por los maestros
Emigdio Isaac Coronado Bussani —coordinador del Colegiado Nacional de Formación
Sindical—, Jazmín Valdez Tam, Oralia Orellana Moreno y Manuel Gilberto González
Gutiérrez, para un mejor desempeño profesional de la encomienda que tienen
asignada dentro de la estructura sindical en el estado, en los temas de
Gobernanza, Ejes y Programas Nacionales, Prospectiva, Comunicación y
elaboración del POA.
“Hay mucho por hacer;
tenemos una gran tarea”, puntualizó Javier San Martín Jaramillo, quien a
escasos días de tomar las riendas de la sección 14 del SNTE, está ocupado en
mantener a los trabajadores de la educación de Guerrero como los guerreros de
este sector, conciente de que desde las aulas, en todas las escuelas del
estado, puede generarse el desarrollo que tanto requieren los guerrerenses.
Hasta ahora, al menos, San
Martín Jaramillo está demostrando que los maestros aglutinados en la sección 14
del SNTE no se equivocaron en elegirlo como su dirigente. Veremos y
comentaremos, decía un maestro del periodismo. Y es que, señala, hay visión de
futuro, rumbo y gobernanza.
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