Mientras suenan voces
de refundación del país y del encono de los padres de los desaparecidos o no
encontrados de Ayotzinapa, México se sumerge en una oscuridad donde el petróleo
cae sin que consigan los buenos intentos reformistas del actual régimen pararlo.
En esta trama enhebrada
como el tejido de la abuela, la lógica sería una ayuda invaluable. La tradición
occidental nos dice que Aristóteles, con su Órganon, es el padre indiscutible
de la lógica. Que de ella se derivan todas las especializaciones y
adaptaciones. De hecho, como lo enseña el estagirita, es un método de razonar.
No hay que olvidar que en las tradiciones de la India, China en paralelo con
Grecia, también se asoman al gran vacío matemático del razonar con orden y
rigor. Uno de mis maestros, cuando nos explicaba a Kant, nos decía que fue solo
hasta que el filósofo de Konigsberg le movió a la lógica, ésta sufrió cambios establecidos
desde Aristóteles.
En la actualidad se ha
desarrollado el método de razonar, hacia la matemática. Entre estas destaca, la
lógica simbólica y la lógica matemática, relacionada ampliamente por varios
especialistas en la llamada teoría de conjuntos. ¿Y cómo se lee esto? A los conjuntos
los podríamos definir como una selección abstracta de objetos, considerados
objetos en sí mismos, que representan y son una herramienta fundamental para la
formulación de cualquier teoría matemática.
Este breve proemio sobre la teoría de los
conjuntos y la lógica aristotélica, me salta porque aparentemente carece de
lógica lo que acontece al interior de este país. Osorio Chong, que no renuncia
aunque haya anunciado la apertura de los cuarteles, que ha enojado aún más a
los de verde olivo, y para no salirse del espectáculo, afirmar con donaire
hidalguense que si habrá elecciones en Guerrero. O que EPN, al igual que Miguel
Ángel Mancera, no hayan dado a conocer íntegra su declaración patrimonial y que
en el país se está pensando en una refundación decidida a acabar con la
partidocracia. Una lógica, anti lógica, es el sumun en que se mueve esta nación agobiada por la violencia y
Guerrero, tal parece que es el faro, la sima del lodo donde se hunde la patria.
Y dónde la lógica no
cuadra es en que a decenas de días, el caso Ayotzinapa siga igual o peor.
Pero donde tampoco
cuadra es en la preselección de candidatos del sol azteca para la gubernatura. La
abstracción sustentada en la teoría de conjuntos, nos puede acercar a un
razonamiento meramente matemático. Del total de aspirantes aparentemente quedan
tres; Beatriz Mojica Morga, Sofío Ramírez Hernández y Sebastián de la Rosa
Peláez. Es una estructura de conjuntos que pesan sobre la unidad. Lógicamente,
representa la unión de tres fuerzas del sol azteca. Sin embargo, la lógica más
simple y la teoría de conjuntos menos abstracta, indica que los tres juntos no
podrían ganar la elección. En el tricolor, en esta semana o cuando esta nota
aparezca, ya tendrá abanderado; Mario Moreno, Héctor Astudillo, Cuauhtémoc
Salgado o Manuel Añorve. Es una razonamiento ya cribado bajo la teoría de
conjuntos bajo el slogan de la “disciplina partidista”.
En cambio en el sol
azteca, una cuarta vía tiene el nombre del alcalde porteño Luis Walton Aburto.
El problema matemático y lógico es que las mediciones no le alcanzarían al sol
azteca para triunfar con Walton. Tampoco la gubernatura y la joya de la corona
Acapulco, podría estar en las cabezas de dos miembros de la misma corriente,
Evodio y Beatriz, lo que por lógica que no es lógica las matemáticas simples
apuntan a que en el fondo del razonamiento Acapulco será entregado a una
corriente y mediante esta negociación ortodoxa y cambio de rumbo ligero a la
nave de los conjuntos heterogéneos, una vez cimentado en el centro de la
lógica, el regreso del Jaguar podría cerrar con matemáticas simples el circulo;
y la lógica que no es lógica se convierta en una simple jugada de sentido
común. Y de tres que son cuatro y de cuatro que serían uno, en el sol azteca en
breve tiempo, se podría tener una definición de los tres que son uno sin ser
cuatro y de los tres y el cuatro que por una mención a las abstracciones
matemáticas que ordenan el cosmos pero que en la tierra fallan, se podría
definir la gubernatura y de esta lógica aún sin comprobar, el regreso del
Jaguar podría darle la vuelta a la lógica que priva en este país y una vez
limados en conjunto las desavenencias conceptuales y simbólicas (desde la
óptica de la lógica simbólica) hacia finales de enero, podrían girar otra vez
los relojes que tienen en la lógica de este país los brazos clavados y para no
ser repetitivo, afirmar que desde el Órganon aristotélico hasta Kant la lógica
no se había movido de su sitial ni un pelo pero que hoy, gracias a la teoría de
conjuntos partidistas aposentados en México, una nueva lógica que depone a las
anteriores, podría mover el sentido lógico de la preselección perredista y
poner regresar por matemáticas puras a quien ha buscado ese sitio basado en una
teoría de conjuntos y abstracciones mediáticas, y que si la lógica de la otra
lógica no nos falla, daría como resultado una candidatura de unidad, donde tres
de cuatro son uno.
En verdad, no sólo el
país necesita una refundación, sino la propia lógica con que se mueven los
seres humanos en medio de un caos donde la teoría de conjuntos mediante la cual
se lleva a cabo cualquier intento matemático por entender al mundo, en este
caso, giran inversamente y la lógica de la no lógica le podría dar la razón al
estagirita o a los creadores de la lógica matemática y de las funciones que los
acompañan y dotar de verticalidad y de una herramienta de razonamiento
conceptual, en donde la teoría de los conjuntos, es la base matemática medible
no con encuestas, sino con el voto que necesitan en el sol azteca, no sólo para
ganar las elecciones sino para definir a su candidato.