Alexandra se reintegra a su vida estudiantil
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Salvar su vida, fue tan solo la primera batalla para Alexandra, adolescente de 12 años de edad, que sufrió severos daños en gran parte de su cuerpo a consecuencia de un atropellamiento. Ahora, y tras un afectivo tratamiento de rápida cicatrización, la menor de edad culminó la última etapa de su rehabilitación con lo cual los médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la salvaron también de sufrir una discapacidad permanente.
Especialistas del Hospital General Regional (HGR) No. 1 Vicente Guerrero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ubicado en Acapulco realizaron la cirugía de reconexión intestinal y colocación de prótesis ortopédica en el pie derecho a menor Alexandra.
En el mes de julio el IMSS informó que una combi del transporte público del poblado Palos Blancos, en el municipio de Petatlán, Guerrero arroyó a Alexandra por más de 100 metros ocasionando heridas en la mayor parte de su cuerpo, dejándola al borde a la muerte.
La derechohabiente, considerada como una paciente con tratamiento de éxito, recibió en primera instancia, terapia de cierre asistido por vacío, es decir, un sistema no invasivo y dinámico que ayuda a promover la cicatrización mediante la aplicación de presión negativa en el lugar de la herida, favoreciendo la reducción del área de la herida, eliminando el exceso de fluidos y estimulando la angiogénesis (formación de vasos sanguíneos).
Esta novedosa terapia, sin duda, salvó su vida, sin embargo aún había riesgos por daños en su aparato digestivo y principalmente daños en su pie, que podría generarle una discapacidad permanente en la marcha (caminar), debido a las afectaciones generadas del atropellamiento.
La prótesis, hecha a la medida de la niña por los especialistas del Seguro Social, va permitir que el tobillo de la paciente tenga funcionabilidad, “es una férula dinámica en la que el paciente va poder caminar sin arrastrar la punta del pie y va hacer trabajar sus músculos para una pronta rehabilitación”.
El subdirector médico del Hospital del IMSS en Acapulco, Jorge Luis Memije Arzate, adelantó que tan sólo serán dos meses en los que la paciente deberá utilizar la prótesis y posteriormente seguir con una vida “plena y sin complicaciones”, ya que se trata de la última parte de su largo tratamiento.
La menor, acompañada de su madre, la señora María de Jesus Mañez, agradeció la atención ofrecida por todo el personal del Instituto, principalmente del HGR No. 1, que desde el inicio de su tratamiento, le otorgó un trato profesional, con calidad y calidez, hasta llegar a esta fase médica.