Pese a lo intenso del trabajo que realiza el gobierno del estado y la alcaldesa de Acapulco, la situación en el puerto se ha complicado y los contagios por covir-19 van en aumento.
Esto va a complicar el
regreso a la normalidad o lo más cercano a esa concepción.
Muy desalentadoras fueron
las palabras de Hugo López Gatel al señalar que Acapulco va en ascenso en el
número de contagios y le falta mucho para llegar al punto máximo.
Por eso no se puede hablar
del reinicio de actividades en este sitio turístico, señaló el funcionario
federal, mientras que Cancún ya está en vías de abrir sus playas.
Hasta el momento, el
puerto concentra el 57 por ciento de casos positivos de Covid-19, y el problema
mayor es que la gente sigue saliendo a fiestas, a echar trago a restaurantes,
realizan peleas de gallos, a cotorrear sin cuidado alguno.
Esa gente sin consciencia
tiene que ser invitada a que se retire a sus casas por las autoridades
municipales y la policía municipal acompañada de la Guardia Nacional, porque
además se enojan si les interrumpen su diversión.
Lo mismo pasa en
Chilpancingo, donde la gente se enoja si le piden usar cubrebocas cuando
asisten al mercado o a los centros comerciales.
Este comportamiento no es
raro, porque México es el país que menos respeta la distancia social, de
acuerdo al estudio que realizó Google.
Google da seguimiento a
131 países y hace el reporte de la movilidad de la población de éstos, donde
los mexicanos son los que menos cumplen esa disposición sanitaria.
El reporte, que data de
abril, señalaba que México no llegaba al 50 por ciento de inmovilidad, mientras
que Brasil alcanzó el 71 por ciento, Argentina y Colombia alcanzaron el 86 por
ciento.
Aunque muchos pueden
justificar que los mexicanos salen a trabajar porque sin eso no habrá ingresos
para comer, Google los desmiente al señalar que al 45 por ciento los ubicaron
en lugares de ocio, 46 en sitios de recreo, 47 por ciento en estaciones de
transporte, 19 por ciento en mercados y 20 por ciento en puestos de trabajo.
El porcentaje de quienes
se quedaban en sus domicilios solo aumentó un 11 por ciento.
Valen esos datos, aunque
sean del mes de abril, para entender el comportamiento del mexicano, pues no se
niega que un alto porcentaje saliera a laborar para asegurar sus ingresos, pero
que google los ubicara en sitios de recreo y estaciones de transporte, habla de
que no le dieron ni le dan la importancia debida a esta pandemia.
Quizá haya que esperar a
que se haga realidad esa dura frase que se mueve en internet, que dice: “Mientras
los muertos no sean tus muertos, nunca entenderás la gravedad de lo que estamos
pasando.”
Es decir, muchas personas
aprenden solo con la experiencia o lo que es lo mismo, no aprenden en cabeza
ajena, sino hasta que les pasa.
En estos días es mayor el
porcentaje de la población que se mueve en las calles y después del primero de
junio se incrementará aún más, cuando todavía no se alcance el pico de
contagios en el estado, lo que hace pensar en un escenario más complicado.
Por el momento Acapulco,
Chilpancingo, Iguala, Taxco y Tlapa son los municipios donde hay mayor número
de contagios, pero Iguala se puede considerar de alta gravedad por el
porcentaje de fallecimientos, de acuerdo al presidente municipal, Antonio
Jaimes Herrera, quien señaló que de 51 confirmados con Covid-19, han fallecido
20 personas, casi el 50 por ciento de letalidad, algo que puede llevar a pensar
que existe mala atención médica o que los pacientes llegan a pedir ayuda en
etapas muy críticas.
En Guerrero será a partir
de hoy, 22 de mayo cuando se inicie una fase más complicada, porque se prevé
que en prevé que durante varias semanas se alcance el pico más alto de
enfermos.
Por lo tanto, se espera un
reforzamiento de acciones preventivas por parte de las autoridades federales,
estatales y municipales, las cuales también tendrían que recibir un
reconocimiento, porque se han puesto al frente de estas acciones, como ha sido
el mismo gobernador y el secretario de Salud, la presidenta municipal de
Acapulco, el presidente municipal de Chilpancingo, entre otros.
Por cierto, en la capital,
las acciones de prevención y de atención a las necesidades de la población se
hacen con el 19 por ciento del personal.
Son 600 trabajadoras y
trabajadores quienes están sacando la casta para sacar a flote las acciones que
regularmente hacen 3150 empleados.
Y eso debe reconocerse,
sin duda, porque son gente que todos los días sale a dar lo mejor de sí mismo,
entregando agua, coordinando labores en el mercado, en el centro de la ciudad,
entregando despensas, limpiando barrancas, y barriendo calles, entre muchas
acciones más.