lunes, 30 de octubre de 2017

ESTRATEGIAS DE SEGURIDAD SON EL EJE CENTRAL EN LA PROPUESTA DE RUBEN FIGUEROA SMUTNY

El empresario y político guerrerense, Rubén Figueroa Smutny se reunió este lunes con la Asociación de Mujeres de Prensa, donde dio a conocer sus aspiraciones en las próximas elecciones municipales y esbozó parte de sus estrategias de gobierno, con el tema de seguridad como punto focal de sus propuestas.

Quien fuera diputado local por Iguala y se destacara como miembro de la bancada priista en Guerrero, indicó que en los últimos dos años, 18,000 negocios han tenido que cerrar por el clima de violencia que predomina en la ciudad, "antes el problema principal de los acapulqueños era el agua, hoy es el tema de la seguridad".

Identificado como un ciudadano interesado en participar en el proceso electoral y convertirse en el próximo alcalde de Acapulco, afirmó estar negociando con varios partidos, pero que de no concretarse, seguirá la vía independiente.

Sustentado en una prolongada carrera en la función pública, Figueroa Smutny afirma que, para contrarrestar los índices de violencia, es necesario diversificar las estrategias, invertir en la educación para "resarcir el tejido social", pero también enfrentar con acciones frontales a la inseguridad.

Afirmó que los pactos de seguridad carecen de sentido pues en lugar de pedirle a la ciudadanía sumarse a las autoridades en el combate a la delincuencia, los gobiernos deben actuar y con hechos sumar la voluntad de la gente.

La certificación de los policías, dijo es un tema pendiente de las dos últimas administraciones que no se pudo llevar a cabo, por tal motivo, señaló es necesaria una policía capacitada porque es imposible armar una estrategia exitosa contra la delincuencia.

Señaló que los gobiernos municipales son quienes reciben las críticas más severas cuando se habla de resultados en los operativos que se realizan en cooperación con los gobiernos estatal y federal. Indicó que la policía municipal debe tener como objetivo hacer frente a ilícitos como el robo, la extorsión, cobro de piso y demás delitos del fuero común, pues son los que más aquejan a la ciudadanía.

En cuanto a la política social refirió una doble estrategia para alejar a los jóvenes de la criminalidad, por un lado incentivar el desarrollo laboral, brindando las oportunidades necesarias e ingresos dignos y en segundo lugar generar una conciencia de legalidad y de que sus acciones generan consecuencias, tanto positiva como negativamente.