El gobernador Ángel Aguirre Rivero e integrantes del Grupo de Coordinación Guerrero se reunieron hoy en Acapulco, con obispos de la entidad, encabezados por el arzobispo del puerto, Carlos Garfías Merlos, a quienes compartieron algunas de las acciones implementadas por los tres órdenes de gobierno en materia de seguridad, para devolver la paz y tranquilidad a los guerrerenses.
En este cordial encuentro se destacó el blindaje en las fronteras con Michoacán en las regiones Costa Grande y Tierra Caliente.
En las instalaciones de la IX Región Militar, el Ejecutivo estatal les informó que reinició el diálogo con integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), a efecto de explorar el mejor mecanismo para que los elementos del Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadana puedan quedar reglamentados y actuar en el marco de la ley.
Dijo que también, en coordinación con las fuerzas federales, se le está dando atención a Chilpancingo para prevenir y disminuir los índices delictivos.
Subrayó que su gobierno le seguirá apostando a las grandes obras que generen inversión, y a la entrega de proyectos productivos para fomentar el autoempleo, que son mecanismos eficaces para combatir a la delincuencia, al dotar a los guerrerenses de oportunidades de ingresos económicos a sus hogares.
En tanto, el arzobispo Carlos Garfias Merlos ofreció colaborar en el ámbito de sus posibilidades para abonar a la tranquilidad de los guerrerenses.