La Esclerosis Múltiple
(EM) es un padecimiento neurológico que le puede ocurrir a cualquier
persona, se manifiesta en adultos jóvenes y con una mayor prevalencia en
mujeres, explicó el Instituto Mexicano del Seguro
Social (IMSS), delegación Guerrero, en la conmemoración de esta
enfermedad este 18 de diciembre.
Tan sólo en el IMSS
Guerrero son atendidos 144 pacientes, de 30 hasta los 69 de edad; de los
que 108 casos son en mujeres y 36 de hombres, explicaron especialistas
del Seguro Social.
El médico internista
Jesús Roberto Valdez Ortiz, indicó que la EM es uno de los trastornos
neurológicos más comunes y causas de discapacidad en adultos jóvenes, y a
nivel mundial se registran dos millones de personas
con la enfermedad.
Mencionó que las causas
de la EM no se conocen todavía y aún no existe una cura, aunque existen
tratamientos disponibles que pueden ayudar a algunas formas de
esclerosis múltiple y hay muchas cosas que se pueden
hacer para mejorar los síntomas.
Entre estos síntomas se
pueden identificar: visión borrosa, debilidad en las extremidades,
sensación de hormigueo, inestabilidad y fatiga, comentó Valdez Ortiz, y
para algunas personas, la EM se caracteriza por
periodos de remisión y recaída (lo que significa que mejora durante un
tiempo pero luego puede atacar cada cierto tiempo), mientras que para
otros tiene un patrón progresivo (lo que significa que empeora de manera
constante con el tiempo).
En cuanto a los
malestares cerebrales y neurológicos están: disminución del período de
atención, de la capacidad de discernir y pérdida de la memoria,
dificultad para razonar y resolver problemas, depresión o
sentimientos de tristeza y mareos o pérdida del equilibrio.
Explicó que la
esclerosis múltiple ocasiona también problemas de erección y lubricación
vaginal; los síntomas del habla y de la deglutir. Además de que la
fatiga es un malestar común a medida que la EM progresa
y con frecuencia es peor al final de la tarde.
Respecto al tratamiento,
el especialista indicó que no se conoce cura para la esclerosis
múltiple hasta el momento; sin embargo, existen terapias que pueden
retardar el progreso de la enfermedad. El objetivo del
tratamiento es controlar los síntomas y ayudar a mantener una calidad
de vida normal.
Destacó que la familia
de los pacientes con EM es de gran ayuda, porque se requiere aplicar
cambios en el hogar para garantizar la seguridad y facilitar el
desplazamiento por la casa de la persona con este trastorno.
Ante esto es importante
que la derechohabiencia acuda a su médico familiar ante la aparición de
los primeros síntomas –de cualquiera de los anteriormente referidos-,
quién a su vez lo remitirá al especialista
del área y el paciente pueda iniciar su tratamiento.