Contrario a la inmediatez
con la que el gobierno de Héctor Astudillo Flores ha atendido y cuantificado
los daños por las contingencias por el terremoto y las lluvias, hay
dependencias federales de las que no se sabe nada.
Lo digo por el Instituto
Nacional de Antropología e Historia (INAH), cuya directora en Guerrero, Blanca
Jiménez Padilla, no sólo es inlocalizable, sino que no se toma la molestia de
informar las afectaciones al patrimonio histórico del estado.
A cinco días del sismo del 19 de septiembre no
se sabe nada del censo de daños en ese rubro, más que lo informado por el
gobernador.
Cuando un sismo anterior,
el 7 de septiembre, afectó a Oaxaca y a Chiapas el censo de ambas entidades
tardó siete días, y eso que en Chiapas hubo 56 edificios patrimoniales
afectados y en Oaxaca 130 inmuebles con valor histórico.
En el registro público del
propio INAH Guerrero tiene solamente 25 inmuebles históricos en total, de ahí
que no se justifica tal tardanza.
Mientras tanto este
domingo en la deteriorada y emblemática parroquia de Santa Prisca, los fieles
taxqueños dieron una gran demostración de fe escuchando misa en la calle y con
paraguas, ante la lluvia que caía.
*Políticos damnificados*
A los que la gente de
plano no les tiene fe es a los políticos, incluido a San Andrés Manuel.
El terremoto agrandó las
grietas y los mismos partidos acabaron de cuartear su credibilidad con una
guerra de ofertas pro damnificados que rayan en lo cínico, e incluso en la
frivolidad de presumir que uno prometió antes que otro, como si eso fuera lo
importante en este momento.
¿Tenía que temblar para
que se dieran cuenta de que reciben demasiado dinero y que lo necesitan más los
ciudadanos a los que pertenecen los recursos públicos?
La sacudida sacó lo mejor
de los mexicanos que se sumaron a las labores de rescate y aportaron de corazón
en los centros de acopio; y lo peor de algunos personajes más interesados en la
guerra mediática del ofrecimiento político, que en sumarse con hechos a la
solidaridad internacional y nacional con la desgracia.
*Funcionario fashion*
El sábado circuló una
captura de pantalla de un grupo de WhatsApp donde el director de Salud del
Ayuntamiento de Acapulco Eger Gálvez Pineda compartió un mapa con una ubicación
en el bulevar Hollywood de Los Ángeles California, y el mensaje: “la tienda se
llama Q de ropa”.
La gente de mala fe
difundió el hecho diciendo que por error compartió su propia ubicación en ese
momento y que se encontraría de shoping en los Estados Unidos, lo cual,
conociendo el espíritu viajero persistente en el Ayuntamiento porteño, tendría
mucha lógica.
Algunos escasos hombres de
buena fe, dijeron que -tal vez- sólo trataba de recomendar a alguien el lugar,
lo cual también es probable.
Aunque el establecimiento
comercial al que se refería es Fashion Q, una tienda de ropa… para dama.
¿Recomendaría además algún modelito en especial?
jalepezochoa@gmail.com