* La Unidad Nacional de
Asociaciones de Ingenieros, AC (UNAI), afirma que no es posible que a la
sociedad se le engañe diciendo que cualquier inmueble y, en especial, una
escuela puede iniciar sus actividades con un simple dictamen de evaluación
preliminar
Ciudad de México, a 25 de
septiembre de 2016
Con relación a los
acontecimientos presentados con los sismos del 7 de septiembre y principalmente
del 19 de septiembre del presente del 2017, se ha generado una información
distorsionada. Todos los que quieren participar en el ánimo de protagonismo da
información a través de las redes sociales y medios de comunicación, a veces
exagerando la tragedia y otorgando criterios de evaluación sin fundamento.
Es necesario que toda la
población esté debidamente informada con relación a los famosos dictámenes
estructurales que todo mundo quiere en especial escuelas públicas y privadas.
Los ingenieros que cuentan
con la patente de Director Responsable de Obra (DRO) son los únicos con las
facultades para signar responsivas para todo tipo de construcciones, los cuales
deberán ser acompañados de corresponsables en 3 puntos:
- Diseño urbano
arquitectónico
- Instalaciones
- Y principalmente un
corresponsable en seguridad estructural que puede ser Ingeniero Civil,
Arquitecto, Ingenieros Municipales, Ingeniero Arquitecto, quienes deben de
estar acreditados a través de los colegios de referencia.
Después de los sismos de
1985, el reglamento de construcciones se actualizó creándose la Comisión de
Directores de Obra y Corresponsables de Obra, que lo coordina ahora la
Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI).
Todos los Directores y
Corresponsables de Obra para obtener su registro deben llevar un curso de
actualización profesional y acreditar el examen.
Por lo anterior no es
posible que a la sociedad se le engañe diciendo que cualquier inmueble y, en
especial, una escuela puede iniciar sus actividades con un simple dictamen de
evaluación preliminar, porque es requisito de ley ser firmado por un
Corresponsable de Seguridad Estructural y este no se puede realizar con una
simple visita.
Se requiere un análisis
más completo, de gabinete, para analizar planos de cimentación, de estructura,
conocer si cuenta con la licencia de construcción, si fue reforzado después del
sismo de 1985, si cuenta con sus placas de visto bueno de operación para
inmuebles que el reglamento de construcción se los exige de acuerdo con la
complejidad del inmueble.
Por eso es arriesgado que
cualquier autoridad federal o de la Ciudad de México autorice el regreso a
clases en las escuelas de todo el sistema educativo, ya que ponen en riesgo la
seguridad de los niños.
En este contexto, para la
Ciudad de México se requiere un plan maestro, el cual debe contemplar la
rehabilitación, reconstrucción de vivienda transitoria y de apoyo económico
individualizado para evitar que los recursos lleguen a los más afectados.
En reuniones que se han
generado de todos los especialistas en la rama de la construcción, se ha
concluido que para el programa de rehabilitación de la Ciudad de México se
requiere que la sociedad civil organizada y, en especial, los ingenieros y
arquitectos participen, porque a través de los medios de comunicación se ha
dicho que ha llegado mucho apoyo material y económico pero hasta el momento en
las brigadas técnicas no se ha reflejado
Se requiere que tanto el
Gobierno Federal como el Gobierno de la Ciudad de México, las organizaciones
acreditadas de ingenieros participen en los planes de construcción señalados.
Con base a lo anterior no
debería autorizarse el regreso de los niños a las escuelas hasta que el
inmueble tenga su dictamen de seguridad estructural firmado por un
corresponsable de seguridad estructural, quien mostrará su carnet vigente,
además el dictamen deberá ser acreditado en las delegaciones políticas en el
caso de la Ciudad de México por la Dirección de Obras y Protección Civil
correspondiente.