lunes, 10 de marzo de 2014

RONCAR EN EXCESO REQUIERE ATENCIÓN MÉDICA: ESPECIALISTA DEL IMSS GUERRERO

La obesidad forma parte fundamental para roncar excesivamente, afectando aún más la salud
Sobrepeso u obesidad, estrés y consumo frecuente o adicción del tabaco y alcohol, son factores que condicionan el tabaquismo y que de no atenderse pueden generar enfermedades graves como hipertensión arterial,  accidente cerebrovascular einfarto agudo de miocardio.
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guerrero indicaron que los ronquidos en exceso, además de “incomodar” a familiares de la persona que la padece, debido al ruido que se genera, puede representar para el afectado la aparición del Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (periodos de cese de la respiración).                                                                                                                                                  Su prevalencia es elevada en la población general; se estima que se presenta en alrededor del 40 por ciento de los varones y el 20 por ciento de las mujeres, y aumenta con la edad. También se estima que el 45 por ciento de los adultos ronca ocasionalmente, y que al menos el 25 por ciento lo hace en forma frecuente.
El coordinador de Información y Análisis Estratégico delegacional, Ángel Bustos Estrada explicó que roncar en exceso también es parte de los trastornos del sueño, así como una alteración en la respiración.
Esto puede tener graves consecuencias, partiendo por un estado de somnolencia temporal, pérdida temporal de la memoria (dificultad para recordar nombres, fechas etc.), incapacidad parcial del raciocinio lógico (realizar operaciones aritméticas por ejemplo) y jaquecas, irritabilidad, dificultad para memorizar, pérdida de conciencia situacional y cambios bruscos de carácter.
Cuando se padece de ronquidos excesivos,  las recomendaciones básicas son: reducir la ansiedad y el nivel de estrés; mejorar las condiciones del lecho y el ambiente del dormitorio; privilegiar los ambientes reposados; practicar ejercicios de relajación; reducir el peso, si es excesivo; no hacer cenas pesadas; no consumir alcohol  y no fumar
Aunque en muchas ocasiones las personas no le toman importancia a esto, indicó que la recomendación es acudir con el médico familiar que hará las preguntas o pruebas correspondiente y, de requerirlo, lo enviará a un especialista.