domingo, 17 de julio de 2016

MIRADA INTERIOR El efecto de las causas Por: Isaías Alanís

Llama poderosamente la atención los tumbos que anda dando el país. Y que conste, no es de ahorita, simplemente todo se ha agravado y contaminado. No me canso de sorprenderme y ya amanece otro escándalo. Y ya no se si maldecir o por la patria rezar. Tengo miedo de buscarla y no encontrarla donde me aseguran los historiadores que se perdió y se la están acabando. Hay momentos en que quisiera mejor rajarme e irme a vivir a Tombuctú, pero un aletazo nacionalista me lo impide, pese a que hay poco que cantarle al México lindo y querido de las películas rancheras, de cantina, balazo y amor freudiano con la hija del patrón. Esa especie de cobro de “pisaje” emocional ante las matemáticas de los rencores acumulados durante siglos de opresión, que en el cuerpo de la mujer amada, se transmuta en ejercicio pleno de una revuelta social, sexual y amatoria.

ISAIAS ALANIS
Lo que acontece es una especie de novela anti ejemplar donde los personajes son de carne y hueso, con nombres y apellidos rimbombantes y señalados en la heráldica nacional de los tiempos modernos.

Y una muestra de esta heráldica inefable de consanguinidad con el poder lo mostró el PRD, al nombrar a Alejandra Barrales como presidente de ese partido. El “purito” (por flaquito y porque tiene la cabeza llena de ceniza) así llamado en la novela Los corruptores de Jorge Zepeda Patterson, Miguel Ángel Mancera, el soltero codiciado logró como en los viejos partidos en el poder en coordinación con la burocracia chuchista, ávida de dólares del presupuesto de la CdMex, colocar a la ex voladora de mexicana de aviación Alejandra Barrales. Lo más interesante es que dos mujeres estarán al frente del partido tercero en intención de votos y ávido de alianzas jugosas para no perder telón en el reparto de prerrogativas para ellos en cash. Por su parte Beatriz Mojica, la que espantó a los propios chuchos por su crecimiento inesperado y veloz cuando fue candidata a gobernar el estado, hoy convertido en asunto de interés nacional por la copiosa producción de opiáceas, que dejan millonarias ganancias a todos, Beatriz Mojica Morga ocupará al igual que Barrales por un año la dirigencia del partido en proceso de desmoronamiento. La dupla Barrales-Morga ¿tienen en sus manos la posibilidad de romper con la telaraña chuchista, o continuar con ese viejo chiche de consanguinidad multipartidista del “mas de lo mismo”?

El efecto sería desastroso para el PRD que terminaría siendo un partido como Ferrocarril del binomio Echeverría-Talamantes. Y las causas sería legítimas dada la proclividad de primos hermanos del sector burocrático del  PRD con el quebradizo PRI. El efecto sería demoledor pero una sangría justa y necesaria.

Aunque la prensa nacional trató de silenciar la entrevista que Ciro Gómez Leyva le hiciera a Andrés Manuel López Obrador, en un programa de radio el pasado jueves y en la internet se filtraran “ciber borregos” sobre lo que dijo y no dijo AMLO. El efecto fue el de un estadista. Por eso el silencio de muchos medios. El viernes la publicó El Universal en primera plana. Y los diarios callaron, con la fuerza en mis manos busque mi compu sin darme cuenta. Y me encontré una serie de choros sobre lo que dijo y no dijo AMLO. Y lo más destacado fueron sus argumentos sobre la reforma educativa. La causa magisterial que ya tiene espacio global, funge como una peligrosa bisagra al seno de la sucesión presidencial y a la caída de EPN. El senador panista Juan Carlos Romero Hicks y presidente del senado de la Comisión de Educación, dijo textualmente: “que los maestros se sientan perseguidos (y con una cadena de muertos en Nochixtlan) y no beneficiados de la reforma educativa basta para que se revise la legislación…” y sentencia: “no nos asusta revisar todas las normas deben modificarse y enriquecerse…” La Jornada/17/julio/16).

La respuesta del senado cuadra con la declaración radiofónica de AMLO transcrita del Universal del viernes: “Una derogación sería la claudicación del gobierno y eso no nos (sic) conviene a nadie. Nosotros no queremos construir el nuevo México a partir de escombros, tiene que haber autoridad y tenemos que llegar al 2018 con estabilidad, con paz social. Si se le vence por completo a Peña Nieto, pues no va ver estabilidad  y no va haber gobierno…”
Los argumentos de AMLO son de pronostico reservado para sus detractores y para esa organización pro privatización de la educación que opera bajo el membrete de Mexicanos Primero, fundada por Emilio Azcárraga Jean y doce amigos cuyo objetivo es hacer negocios blancos y convertirse en dueños de la educación en México y privatizar cualquier intento por crear una educación nacionalista y liberadora. ¿Por qué a esos sicarios de cuello blanco no los encarcelan, les quitan convenios de publicidad y se legisla para que la televisión privada sea educativa y no una bazofia denigrante y diseñada para crear ignorantes, como ellos?

Y todo lleva a pensar que el equívoco de armar la amañada reforma tuvo en su gestación, como en casi todo, tender los puentes con cemento de alta resistencia para dejar lista la privatización de un sector que requiere mucho más que una reforma laboral y fascista. Sin pasar por alto que un efecto tendría como blanco al charro sindicato de maestros, Gorgona de cien mil cabezas creada por el propio sistema de consanguinidad múltiple y de toda laya, como el sicariato político logro de las propias instituciones emanadas del partido en el poder que lo gestaron, prohíjan y absuelven con un manto de impunidad e inmunidad y lo mantienen. Y el acto reflejo del senado, no es producto de una “causalidad” ni de la casualidad, como las declaraciones de AMLO. Esta ley física que puede ser interpretada desde diversas ópticas de la física, en política es muy simple. Las causas ya generaron efectos y esperemos que sean para bien de México.