Los centros de aprendizaje criminal y
universidades privadas del narco, dan una muestra en vivo de los exámenes que
los graduados tienen que cumplir al término de sus asignaturas y presentar ante
el pleno de doctores honoris causas, los exámenes y defensa de sus tesis
académico-prácticas de lo aprendido en la calle y en los años de reclusión bajo
reglas estrictas de aprendizaje y conocimiento teórico práctico. Lo acontecido
en el penal de Apodaca, Nuevo León es una muestra al azar.
Se ha colado en terminales cibernéticas y
telefónicas, que la profesora Gordillo, cuenta entre sus diversos asesores
especializados en técnicas de disuasión gramscianas a un egresado de estas
universidades libres y soberanas. El letrado realizó su maestría en el penal de
Puente Grande y su doctorado en el del Altiplano. Él, con un sequito de
creyentes, preparan la estrategia electoral que les cuadre el primero de julio,
hagan ganar al candidato elegido y no pierdan su registro para que al
franquicia panalera siga incrementando la riqueza de la abeja reina.
El PAN, recurrió a otro asesor en materia
de encuestas y diálogos a los que llamaron debates para la elección de los dos
mosqueteros perdedores y una mosquetera que ya son senadores del su partido: Ernesto
Cordero, Cocoa y Alonso Lujambio. Dos hombres ligados al señor Felipe Calderón
y una mujer; el primero, sin memoria, el segundo con tratamientos intensivos
por una enfermedad incurable. La mujer, perdedora en Michoacán, y de paso, su
hermana. De este triángulo de perdedores, saldrá la tripleta que manejará las
acciones en el senado de los hijos del PAN.
En Guerrero, la Auditoría Superior de la
Federación, (ASF) dio los nombres de las dependencias que están en la mira. La
administración del contador Torreblanca, no sólo dejó un tufo en papel
periódico, una jedentina a letrina capaz de ser olida a kilómetros de distancia
donde prepara su regreso apestoso a través de las siglas de su auténtico
partido el PAN, que también se debate en un caudal de heces y corrupción
vergonzante para el país como los dineros desviados por la candidata Josefina
Vázquez Mota, cuando estuvo al frente de la SEDESOl, en el periodo
trágico-cómico de Chente el de las Botas, hoy a punto de también ser auditado
por el dedo magnánimo de Felipe Calderón. Chepina desvió montos enormes de
dinero destinados a la sierra Tarahumara para favorecer al PAN, las
consecuencias fueron terribles por el impacto de la sequía que motivo el
suicidio masivo de raramuris ante la impotencia, la falta de alimentos y los
más esencial para vivir.
La ASF, bucea en las cañerías y
alcantarillas de la administración pasada de lanza. Entre un lodazal de hechos
contrarios a toda ley, la fetidez la llenado de miasmas a la Secretaría de
Finanzas, la de Salud, el Conalep, el Instituto Guerrerense de la Cultura, el
Fideicomiso Acapulco, la Secretaría de Recursos Agrarios, la Secretaría de
Recursos Naturales y Medio Ambiente, el Colegio de Bachilleres, y la cereza del
pastel, la SEG.
Pisando firme, las administración de Ángel
Aguirre, de acuerdo a la investigación que lleva a cabo la ASF, podría llamar a
rendir cuentas a Jaime Herrera, ex de la
Secretaría de Salud, y José Luis Gonzáles de la Vega tero, de la SEG, entre
otros.
Ante semejante aroma a putrefacción administrativa,
en el caso de la SEG, el actual Auditor del Estado, Arturo Latabán López,
reconoció que el ex mandatario Torreblanca, estuvo enterado de las
irregularidades. Este anunció lo da en el día en que el señor Latabán, presentó
su Plan Estratégico 2011-20018, a diputados e invitados. Y en la entrevista
publicada en (el Sur/23/2/2012), ante
la insistencia del reportero, se hizo como el tío Lolo. Pues su encargo como
Auditor Interno de la SEG, lo ubicó en una posición privilegiada para saber
desde dentro los manejos de los dineros que hoy están siendo auditados por la
ASF.
Que la ASF, siente un precedente histórico
y sean castigados los culpables de malversar los fondos del pueblo de Guerrero,
ya basta que el estado de los más pobres del país, siga siendo la cueva de Alí
Babá y sus cuarenta ladrones.
En Guerrero, la noticia de la muerte de
Cuauhtémoc Sandoval, nos llenó de tristeza. Joven a sus sesenta y un años, el
miércoles 22 de febrero por la tarde, dejó de existir por un fulminante paro
cerebral, quién se desempeñaba como Secretario de los Migrantes. Amigo de la
familia y muy querido compañero de diálogos, reflexiones y proyectos, dejó de
existir en la plenitud de su vida.