miércoles, 25 de febrero de 2015

LOS BUITRES DE LA BATALLA DE GETTYSBURG






Después de tres días y más de 52.000 muertos entre los ejércitos, de los estados del Norte «La Unión» y los del Sur «La Confederación», el 3 de de julio de 1863 finalizó la Batalla de Gettysburg. Pequeño pueblo de Pensilvania que marcó el punto de inflexión en la Guerra de Secesión.


Amos Humiston soldado de La Unión que murió agarrando la foto de sus hijos en la Batalla de Gettysburg.


La batalla más sangrienta de la Guerra Civil norteamericana con el mayor número de bajas en suelo estadounidense y que enfrentó al mediocre general George G. Meade (nacido en Cádiz), contra hasta el momento invicto General Lee.



La victoria de la Unión hundió la moral del ejército del sur, marcando el principio del fin de la guerra civil.

Y es en este lugar ahora convertido en Parque Nacional, donde cada invierno desde aquella trágica batalla hace ya mas de 150 años, se reúnen miles de buitres. Son muchos los que especulan que estos buitres negros o zopilotes, vuelan allí todos los años, desde hace generaciones esperando encontrar la enorme cantidad de carroña que disfrutaron los antepasados de estas aves necrófagas.


Grupo de buitres negros americanos, zopilotes o jotes de cabeza negra. Ave carroñera que en Estados Unidos es ilegal apresar, matar o poseer bajo multa de hasta de 15.000 dólares y hasta seis meses de prisión.
Antes de aquella masacre no había tal cantidad de buitres, de hecho prácticamente no se los podía encontrar en la región. Pero aunque parece, que la reunión de miles de ejemplares en este mismo lugar, sucede desde la Batalla de Gettysburg, 'el festín' no fue con los cadáveres de los soldados (22.140 unionistas y 30.750 confederados), dado que según los historiadores estos cuerpos al sol del verano, fueron enterrados rápidamente. Pero sin embargo los restos de más de 3.000 caballos y mulas utilizados por la caballería no se retiraron y fueron alimento para las aves.


Caballos muertos en la granja Trostle en la Batalla de Gettysburg.

 Otros aseguran que los buitres siguen acudiendo al Parque Nacional Militar de Gettysburg porque se trata de una zona protegida en la que abundan ciervos, y porque es un buen sitio para anidar por la morfología del terreno y el tipo de vegetación.
De todas formas la visita anual de las aves carroñeras al campo de batalla convertido en muladar y que quedó grabado en su memoria nos hace recordar el horror de las guerras.
"La cosecha de la muerte" soldados de la Unión descalzos en la Batalla de Gettysburg, fotografía del 5 de julio de 1863, por Timothy O'Sullivan,
Sin embargo los buitres que si aparecieron tras el cruel combate fueron otros. Buitres de campo de batalla como el que aparece en la siguiente fotografía:

De nombre Godfor, esta criatura carroñera seguía la estela de los ejércitos, robando a los muertos mantas, ropa, las botas o todo aquello que encontrase de valor y pudiera rapiñar a los cadáveres.