martes, 4 de septiembre de 2018

EPÍSTOLAS SURIANAS // (Carta a Don Héctor) De Julio Ayala Carlos

POCOS SON, HAY QUE DECIRLO, los diputados que entienden su papel, y lo que es más, a quién se deben. Y es que si bien es cierto es que como candidatos fueron propuestos por el partido político al que pertenecen, es también muy cierto que fueron elegidos por el pueblo al que teóricamente se deben. Por desgracia, muy pocos lo entienden.

Y es que más que ser representantes populares, los diputados locales representan a su respectivo partido político, y por ende, a los intereses de éste. Y eso incluye a todos, de ahí que, como ocurre en la Cámara de diputados local, en la Cámara de diputados federal, y por supuesto en el Senado de la República, cada partido político integra su fracción parlamentaria o se asume como “representante de partido”.

Se entiende, sin duda, que deben tener compromisos con su partido o el partido que los postula, pero no se entiende que los intereses de éstos estén por encima del interés supremo, a quien relegan por los intereses partidistas.

No es pues casual que los diputados, que se dicen representantes populares, presenten propuestas de leyes y acuerdos con el sello de su partido, es decir, con la visión e interés del partido político al que pertenecen, y no es casual también que precisamente por ello el resto de los diputados no hagan suya la propuesta de referencia, porque no proviene del grupo parlamentario al que pertenecen, de tal forma que, o se rechaza, o tiene que modificarse la iniciativa a fin de que también contenga el interés de los otros.

Por supuesto, las iniciativas de ley, o propuestas de acuerdo, deben mejorarse con la participación de todos los diputados, sin embargo, hay que decir que cuando no hay acuerdo entre las fracciones parlamentarias y representaciones de partido, esas mismas iniciativas de ley o acuerdos parlamentarios simplemente se desechan aunque “a ojos vistos” sean buenos para el pueblo.

Urge pues, que más allá de los intereses partidistas, los diputados locales, para centrarnos en Guerrero, pongan por encima de todos ellos los intereses del pueblo, de tal forma que la única diferencia entre cada uno de los 46 que integran la 52 Legislatura sea el lugar donde nacieron, y no los colores e intereses del partido por el que llegaron al Congreso. Ojalá y lo entiendan los diputados!

Es cierto. Los diputados llegaron al Congreso por un partido político, pero al protestar el cargo de diputado se convierten en representantes del pueblo. Ojalá y lo entiendan los diputados de Morena, que son mayoría en la 62 Legislatura, y también los que integran la fracción parlamentaria del PRI, del PRD, y los diputados que llegaron al cargo a través del PVEM, el PT, el PES, así como el del PAN y MC.

Por cierto, pocos son los diputados de la 62 Legislatura del estado que tienen experiencia legislativa. En efecto, de los 46 diputados que integran el Congreso local, no son más de 10 los que tienen experiencia. El resto, supongo que tienen ganas de hacer bien las cosas.
EN OTRO ASUNTO, ESTE LUNES el Presidente Enrique Peña Nieto emitió un mensaje con motivo de su tercer y último informe de gobierno, luego de que el pasado sábado lo haya entregado al Congreso de la Unión. Para muchos, principalmente para los que no comulgan con su gobierno, su administración ha sido desastrosa, mientras que para los que le son afines, es positivo.

Para algunos, el Gobierno de Peña es y ha sido de lo peor, y añaden que deja un país en desastre. Para otros, con todo y sus yerros, el Presidente Peña sentó las bases para un mejor país. Ya habrá tiempo para analizar su gobierno. 

Por cierto, el Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados se pronunció por “construir el futuro de México con base a lo que hemos logrado”, atendiendo en todo momento los rezagos que impiden la igualdad social y económica de todos los mexicanos. Lo anterior, en el marco del mensaje del Presidente Enrique Peña Nieto con motivo de su sexto informe de gobierno.

En efecto, la fracción priista en San Lázaro destacó los logros alcanzados en estos seis años de gobierno. “La actual administración debe ser evaluada de manera objetiva, de acuerdo a resultados y cifras medibles; las críticas emitidas desde la divergencia política que sólo buscan desconocer estos logros, también demeritan el esfuerzo de millones de mexicanos que han trabajado para ello”, aseguró el coordinador parlamentario René Juárez Cisneros.

POR ÚLTIMO. MIEMBROS DE LA CIDH presentaron de nueva cuenta un informe sobre el Caso Iguala, con los mismos resultados anteriores, y con la misma postura de rechazar la “verdad histórica” del Gobierno mexicano. Es decir, nada nuevo. Todo ello, en las instalaciones de la normal de Ayotzinapa.

Para los de la CIDH, el culpable de los lamentables hechos es el Gobierno mexicano, y de ahí no los sacan. Suponen todo un entramado para asesinar y en su caso desaparecer a los 43 normalistas en Iguala, cuando las investigaciones señalan que fue un hecho circunstancial, al haber sido confundidos los estudiantes con miembros de la delincuencia organizada, toda vez habían robado un autobús lleno de droga con destino a los Estados Unidos.