1 - Es necesario que los niños y las niñas nos vean, siempre que sea posible, con un libro en la mano, sentirán más interés por leer un libro si ven que este hábito está presente en su entorno. A los niños les encanta imitar, es su forma de aprender. Si ellos notan que a los adultos les gusta leer y que tratan los libros con cuidado y respeto, ellos probablemente, harán lo mismo.
2 - Es necesario que estemos convencidos de que la lectura debe ser empleada como una forma más de diversión y no como una obligación.
3 - Cuando el bebé consiga sentarse firme en el suelo o en la cuna, hay que ofrecerle libros para que los maneje. Existen en el mercado libros pequeños y curiosos hechos con tela, e incluso con material plástico indicados para el juego a la hora del baño. Existen también pequeños diccionarios para que los niños se vayan familiarizando con las palabras, las letras, relacionándolas poco a poco a la imagen. El secreto a esta edad, es hacer que vean el libro como un juguete más, con el cual podrá aprender, tornarse mayor, descubrir, crear fantasías, y oír muchas historias interesantes y encantadoras. Al principio, tratar de dar preferencia a los libros ilustrados, con pocas palabras. Existen libros que contienen sonidos incluidos y también trozos de lana, y de otros materiales para que los bebés disfruten también con el tacto. ¡Los hay también con olores! Programa de Fortalecimiento de la Calidad en Educación Básica.