Los indígenas radicados en Acapulco y un gran número que
habita en el Estado de Guerrero, se
dicen excluidos de un proyecto de gobierno que lejos de apoyarlos ha eliminado
la oficina de atención a los asuntos indígenas con la que se contaba en el
gobierno anterior, denuncio Magdalena Valtierra García Presidenta de la Asociación de Mujeres indígenas radicadas en Acapulco
(AMIRA).
Consideran que al haber sido eliminado y sin explicación
alguna la oficina que se encontraba en la ciudad de Chilpancingo reciben tres veces la discriminación, una por ser
mujeres, otra por ser indígenas y la tercera por no estar representadas para
recibir algún tipo de ayuda.
Magdalena Valtierra García considera que es importante
que se establezca por parte del gobierno del Estado una delegación en Acapulco
que oriente y se encuentre al pendiente
de los indígenas, quienes como cualquier ciudadano necesita de una oficina para
tratar sus asuntos que van desde mejorar sus condiciones de vida a través de organizaciones, proyectos productivos y de
medios para comercializar los productos artesanales que diariamente elaboran y recibir asesorias
para sus problemas de salud, cuestiones jurídicas y agrarias.
Comenta que esta organización aglutina a más de 200
personas de las cuales 180 son mujeres y que carecen del documento que les
garantice la legalidad de la organización y por ello requieren el apoyo
gubernamental para que dejen de trabajar en casa y formen establecidamente las
misceláneas de trabajo donde aprendan y enseñen talleres de técnicas de
costura, bordado y del resto de los
trabajos artesanales que producen.
Menciona que desean dejar de poseer discriminación y
contemplar mejores condiciones de vida a través de proyectos que les permita
aumentar la producción y contar con mercados para expender sus mercancías y
dejar de hacerlo en la vía pública.
La originaria de Xochistlahuaca denunció que la cantidad
que se les cobra por vender en vía pública los días sábados y domingos es
depositada para los bolsillos del director de reglamentos que el mismo pasa la
charola además que esta cantidad no es
reportada a las arcas municipales. “Nos cobran y nos andan correteando” expresó
la presidenta de la asociación.
Por otra parte denunció la exclusión y discriminación de
la regidora Iris Rosas Sereno quien continuamente los divide con intrigas y
trata de que no obtengan apoyos a menos de que ella los coaccione y maneje a su
voluntad como objetos y títeres de la funcionaria que se molesta cuando no la
toman en cuenta.
Magdalena Valtierra García señala que son muchos los
problemas a los que se enfrentan en las ciudades urbanizadas como Acapulco por
que sufren la discriminación por ser indígenas y mujeres que emigran de sus
pueblos por soñar con una vida mejor y que al encontrarse con tantos problemas
se arrepienten pensando que tal vez sería mejor haberse quedado para ser
vendida por sus propios familiares en contratos matrimoniales que van desde la
edad de los diez años, para trabajar todo el día en la crianza y trabajo del
campo aparte de ser golpeadas y víctimas de la violencia machista y sinn
oportunidad de una educación que les abra la conciencia y aprender a defender
sus derechos.
Hizo un llamado a la esposa del gobernador, la señora
Laura del Rocío Herrera de Aguirre para que les ayude como cuando organizó a
los grupos de indígenas para que trabajaran en talleres con la técnica de
artesanías estilizadas y a buscarles los mercados para que puedan vender sus
productos y alcancen como cualquier guerrerense su derecho a una vida mejor.
Magdalena Valtierra García estuvo como invitada a la
reunión de cada lunes de la sesión de las Mujeres de la Prensa en Guerrero donde
expuso el tema de la discriminación a los indígenas de Guerrero y denunció los
hechos// Revista Suriana