lunes, 19 de marzo de 2012

La Justicia Privada y La Letra Muerta Emilio Nahín Rojas Madero Fredy Leyva Irra




“Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro” –Revelaciones 22:19–

Para los sociólogos investigadores del Derecho; ante la imposibilidad de comprenderlo, han creado de él un estribillo que versa así: “¿Por qué el Derecho dice lo que dice? Pero no dice lo que me gustaría que dijera y que fuera lo más justo”. Para el Dr. Arturo Fernández Arras profesor de la UNAM; el Derecho no es más que el traje perfecto para la protección de los poderosos y el Estado, expresando que –“Toda Constitución Política, ley, norma y estatuto sobre la tierra; solo se tiñe de solemnidad social en el discurso; sin embargo, en la realidad social misma; simplemente vela por los intereses económicos, políticos y de poder, mas no en busca de una justicia igualitaria”–. Tal ves esa sea la razón por la cual en las cárceles del mundo abundan millones de hombres condenados hasta por 45 años de condena; tan solo por robarse una gallina (alimento). Mientras que por las calles transitan en limosinas y libremente, cientos de hombres que desfalcaron a pueblos con fraudes millonarios y son aplaudidos por los gobiernos cínicos.  

En éste mundo globalizado; donde para el hombre todo es dinero, poder o materialismo y lo humanístico idealista social es un simple estorbo ante los proyectos de extracción de capital, se hace necesario dejar en claro la epistemología y etimología ligada de las dos primeras palabras adjetivas con las que se titula nuestro artículo. Y con ello poder concebir en el lector nuestro planteamiento sobre lo que realmente es la justicia en México y el mundo. En pocas palabras: es darle la verdadera connotación con la que debe de ser concebida a la justicia. Así pues, se establece que  la “JUSTICIA” para algunos tratadistas; es el conjunto de reglas y normas que establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones, autorizando, prohibiendo y permitiendo acciones específicas en la interacción de individuos e instituciones. Para Domicio Ulpiano: La justicia es la constante y perpetua voluntad de dar (conceder) a cada uno su derecho". Por otro lado; desde una concepción generalizada; la PRIVATIZACIÓN no es mas que un proceso jurídico-económico mediante el cual las actividades empresariales, son transferidas del sector público al sector privado, es decir, traspasadas o tomadas ya sea desde el Estado o la comunidad hacia agentes económicos privados y ¡acaso la impartición de justicia no da pie a ser captadora de un exquisito capital económico!

Ahora bien; uniendo ambos preceptos; bien se puede decir que la “Justicia es Privada”, puesto que es el conjunto de reglas y nombras que establecen el marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones que cuenten con los recursos Económicos o de Poder y puedan adquirir el derecho de justicia. ¿Qué la justicia no es privada? No olvidemos el caso de la niña Rubí Marisol Frayre Escobedo de tan solo 16 años de edad asesinada a manos de Sergio Barraza Bocanegra. A quien los tres jueces: Catalina Ochoa Contreras, Nezahualcóyotl Zúñiga Vázquez y Rafael Boudib, le dejaron en libertad tan solo por tener Poder y respaldo del narcotráfico a pesar de confesarse culpable. Y quienes huyeron del país después del asesinato de Marisol Escobedo Ortiz, madre de Rubí Frayre; cuyo único delito fue el de seguir exigiendo justicia. E irónicamente pretextaron que se exiliaban porque en –“México no se sentían seguros ante la falta de seguridad y de justicia”–; por lo visto les dio amnesia, porque se les olvido que ellos mismos eran quienes representaban dicha envestidura.

Otro caso ejemplar en el que la justicia se enraíza en el calificativo de privatización es el de Florence Cassez; también conocida como “La Francesita”. ¿Culpable o no? Es un resolutivo en el que no podemos ahondar; más ante un sistema procesal de justicia que constantemente es violentado con la alteración de pruebas y falsificación de testimonios o alteración de la escena del crimen en beneficio de aquellos que tienen Poder y Dinero. Tanto que los medios de comunicación, la propia justicia, el Estado y los órganos de investigación (PGR) pueden montar todo un teatro para beneficiar a gobiernos exteriores, grupos de secuestradores  o de narcotraficantes y dejar como santos a los demonios culpables de una resolución injusta por parte de los amafiádo Tribunales Federales (locales) de Justicia y asiendo ver al gobierno federal como un Poncio Pilatos. Sea culpable o no la francesa Florence Cassez; se debe de presentar un proceso trasparente, pues así lo exige el pueblo Mexicano. No solo es cuestión o interés del agraviado sino de toda una nación que pide a gritos tener seguridad y paz social.

Por otro lado; éste tema debiera ser aprovechado por nuestras autoridades, pues lo que bien estan dejando ir de lado nuestros representantes de la justicia y nuestro sistema judicial, es que bajo el respaldo de las embajadas mexicanas en el extranjero y con fundamento en los tratados internacionales en materia de justicia; sea utilizado para que así mismo como los gobiernos internacionales tiendes a exigir a la justicia mexicana el ceder a sus resolutivos, veredictos o laudos para con sus conciudadanos, así mismo les exijamos a los homólogos de la justicia en esas naciones, que le otorguen el mismo trato a nuestros compatriotas con problemas legales en el extranjero. Tal ves no sean suficientes estos caso de ineficacia judicial; pero y qué se puede decir de la participación de la justicia en el esclarecimiento del desfalco financiero mejor recordado como FOBAPROA y que fue solapado por el gobierno salinista.

Los gobiernos y sus leyes castigadoras tan solo se enfocan en agredir o aterrorizar de forma racial y marginal a los pobres, los indígenas, las personas con preferencias sexuales distintas, pues siempre son excluidas del derecho a la justicia. Los tribunales, jueces y magistrados han hecho de la justicia un mercadeo donde se compra y se vende la libertad. Pues si no aportas los $200.00 pesos para el secretario de acuerdos, los $500.00 para derecho a copias de tu expediente, los $700.00 pesos por hora de honorarios al litigante y de $5,000.00 a $15,000.00 pesos para el señor juez, es seguro que tu litigio será eterno y con un resolutivo en tu contra. La otra solución que queda para las partes en controversia, sería el prostituirse sexualmente con él o los jueces. A estos representantes de la justicia no les importar que los códigos o la propia constitución política digan que todos los individuos son iguales y que por lo tanto; todos tienen los mismos derechos de un juicio justo; pero lo cierto es que en la realidad todas esas teorías, preceptos, leyes y reglamentos son pimples “letras muertas”. Y si ese es el reconocimiento que se les hace a las leyes ¡Para qué queremos un congreso de legisladores que solamente fungen como parásitos! Pues al final de cuentas; todo su escaso trabajo legislativo sale sobrando.
Qué se puede esperar de un sistema económico capitalista que todo lo ve como un negocio. Si se privatiza el agua, la luz, el petróleo, las líneas de comunicación bajo el pretexto de “concesión”; ¿Por qué no pudimos haber advertido que la justicia también iba a ser privatizada? Si no lo hemos notado; privatización es la entrega de un servicio a manos de un ente particular o familia y muchos de esos magistrados en el amparo de la impunidad; han secuestrado a la justicia y la han convertido en un negocio de familia, pues resulta ser que todos los que ostentas esos cargos son primos, hermanos, tíos ¿O no es así? Pero aquellos juristas que se partieron el alma ante las miles de noches enteras en vela por aprender la ley y llegar a ocupar uno de estos nombramientos, ese sueño les fue arrebatado porque la muerte les llego primero.

La próxima vez que algún jurista cupular venga a deciros que la justicia es un bien público; ignórenlo, pues sus palabras denostaran que él también es un esbirro de esa mafia jurista. Y que quede claro; la JUSTICIA es privada y la LEY es letra muerta. También son sicarios eso jueces que dejan en la impunidad a criminales como Sergio Barraza, Florence Cassez, Apolinar Horcasitas con su crimen de la guardería ABC y millones de crímenes mas en todo el mundo. No han dado sus resolutivos con base al derecho y la justicia; sino que han sido manipulados por intereses políticos y económicos. Ya se hace necesario que las instituciones de justicia se les sean arrebatadas a esas familias (mafias) y pasen a ser verdaderos órganos autónomos, no dependientes ni propuestos por el propio Poder Ejecutivo a quien en todas esas ocasiones obscuras le sirven de solapadores. México y el mundo exigen justicia o de lo contrario; preparémonos para vivir una Grecia Mundial. La privatización es el peor camino para el hombre, gracias a ella así esta nuestro mundo y nuestras leyes, esto es lo ocurre con una Justicia Privada.

Comentarios: