El Universal
Pedro Joaquín Coldwell, presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), afirmó que es momento del cambio de estafeta en el gobierno nacional, porque no quieren otro sexenio de muerte y odio, al encabezar junto con su virtual candidato presidencial Enrique Peña Nieto, el 83 Aniversario de la fundación del PRI.
"Es el momento de cambio de estafeta, ya es tiempo de que volvamos a entonar el himno a la vida y no de promover políticas de muerte (...) al PRI corresponde ponerle fin a la pesadilla de dolor, violencia, corrupción y pobreza que el panismo le ha recetado al país a lo largo de estos años. Porque no queremos otro sexenio de muerte y miedo".
Durante el evento, el dirigente advirtió que la derecha mexicana promueve más de lo mismo y la izquierda del país pasa súbitamente del radicalismo delirante a la república amorosa.
Ante la cúpula de este organismo político -integrada por la dirigencia nacional, sus 20 gobernadores, líderes parlamentarios y candidatos al Congreso de la Unión-, Coldwell acusó al gobierno federal de no tener a los marginados en su mira.
"El problema es que el gobierno actual ha empobrecido la política y ha centrado su argumentación casi exclusivamente en los temas de delincuencia organizada, acciones que no terminan de debilitar a las bandas criminales, pero sí producen bajas entre civiles inocentes. El Poder Ejecutivo federal reduce su óptica a la represión armada y el resto de la agenda del país se ha postergado", indicó.
En el Auditorio Plutarco Elías Calles, de la sede nacional del PRI, el presidente de este organismo político dijo que la delincuencia y la corrupción crecen precisamente por la ausencia de políticas económicas y sociales y por la errática política de seguridad y de procuración de justicia.
"Las obsesiones electorales han contaminado la lucha contra el flagelo de la delincuencia. En vez de convocar consensos para combatir a los criminales, las autoridades se esmeran en partidizar el tema, lo utilizan como un instrumento para descalificar a otras fuerzas políticas o para denostar a los otros niveles de gobierno", puntualizó.
El presidente nacional del PRI dijo: "Requerimos abatir el pervertido sistema educativo, en el que los niño y los jóvenes son engañados con un simulacro de educación, esfuerzo en el que además deben colaborar los padres de familia, los maestros, los alumnos y los medios masivos de comunicación. La pobreza no se vence con dadivas y subsidios, sino con empleos permanentes y bien remunerados, con una efectiva y sustentable seguridad social".
Coldwell dijo que la hambruna que padecen los tarahumaras exhibe públicamente la ausencia de una auténtica política social; "los marginados no están en la mira del gobierno de derecha. Lo muestra la extensión de las colonias proletarias sin servicios y sin esperanza".
El líder del priísmo nacional afirmó que hay una fatiga generalizada entre la población especialmente entre los jóvenes.