Los
aspirantes del sol azteca a la alcaldía de Acapulco, David Jiménez Rumbo y
Evodio Velázquez Aguirre, deberás mandaron a sus “enanos” a reprochar la presencia de ciudadanos perredistas,
en la toma de protesta del presidente nacional del Movimiento Ciudadano, como
candidato a la alcaldía de Acapulco?. En serio nos preguntamos, ellos los
enviaron? Si fue así, que falta de
madurez política. Si no lo fue entonces, estamos en el caso, de que “no hay
peor p…erredista, que uno o varios p…rredistas con iniciativa.
Demuestran
además de intolerancia por el libre albedrio del “otro”, el cretinismo oscuro y
ramplón como venido del siglo XVI; por qué, reprochar la asistencia de
ciudadanos, sin importar el color del partido al que pertenezca, o al club del
que sea fans, diferente a la de su
supuesta tribu, es esencialmente intolerancia, que como “marca de agua” del
perredismo sumido en las cavernas, muestra a un perredismo en su última fase
antes de desaparecer, porque gane o pierda, este primero de Julio, Andrés
Manuel López Obrador, ya tiene la fecha para sepultar al perredismo de la faz
de la tierra, sepultar a un partido que nació con serios defectos institucionales,
y que sólo refacturó el “totalitarismo” del priísmo que le dio vida, para
convertirse en un partido de masas, en un partido del siglo XIX, en un partido
de “proles” como bien los definiera “Paulina”. Y todo esto se lo han ganado a
pulso, y para muestra basta un botón, como el que nos ocupa.
Con
“Morena” convertido en partido político,
la izquierda mexicana dará un gran salto a la integración de un partido de
izquierda más hegemónico, que romperá con el “status” presidencialista en que
quedo atrapado el Partido de la Revolución Democrática, PRD, con todos sus
grandes defectos, como ya lo vemos, y
ninguna de sus virtudes.
Los
indignados de marras, deberían de formar un movimiento de protesta contra la
crisis, y por la exigencia de una política asistencialista al margen de las
condiciones de manejo de las políticas económicas panistas, porque con
indignados como los mencionados arriba, los jefes de estos invertebrados, David
Jiménez Rumbo y Evodio Velázquez Aguirre, con sus firmes aspiraciones políticas,
la izquierda perredista en Acapulco y en cualquier lado, en lugar de ganar
adeptos, suma claramente adversarios, porque fracturan consensos básicos
logrados con alfileres, y lo que pueden
lograr con esas actitudes y conductas mezquinas, es abonar voluntades en contra.
Mala estrategia.
Dos.
El Registro Civil de Acapulco, a sido convertido en un Bunker, aterrorizando
con ello a los centenares de empleados adscritos a la Sección 19 así como
a funcionarios, e invadiendo de terror y
zozobra los miles de ciudadanos que tienen por necesidad que acudir a tan
importante Dirección Municipal, pues de entrada se encuentran que desde el
acceso hay gente “agentes ministeriales” fuertemente armados”, al mando del
comandante Rizo Valverde, ello dizque para proteger a su jefe, el director de
nombre, Miguel Ángel Hernández Albarrán, ex director de Transito Municipal, y de la Policía Preventiva, las
que tuvo que abandonar, por supuestas amenazas en contra de su existencia,
siendo protegido por su amigo, el alcalde de Acapulco, Manuel Añorve Baños,
enviándolo como director del Registro Civil; quien sí quiso hacerle un favor a su “amigo”,
lo que logró fue poner a la ciudadanía acapulqueña en flagrancia de
inseguridad, dado que ya se ha visto más de un connato de violencia en dicha
dependencia, edificio de 5 niveles, que además de ser una oficina pública a
estas alturas “del partido” carece de “Salida de Emergencia”, dado que el
acceso a los pisos superiores es la única ruta existente. Y seguimos escuchando
la demagogia y la retórica de Melquiades Olmedo, director de Protección Civil,
hoy más ocupado en protegernos del Tsunami que se avecina,…será del Tsunami
político, que arrasará de amarillo a Acapulco y a Guerrero.
Email:gernestorivera@gmail.com