EFRAIN FLORES IGLESIAS |
Su objetivo es muy claro: no
salir de escena y fortalecer a su partido rumbo a la elección de 2018. Por
eso anunció este domingo su intención de dirigir de nueva cuenta a Movimiento
Ciudadano (MC) en el estado de Guerrero.
En efecto, me refiero al empresario gasolinero y ex candidato a la
gubernatura, Luis Walton Aburto, un
personaje que en las últimas semanas se ha dedicado a orquestar una campaña de
desprestigio en contra del alcalde perredista de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre.
Luis Walton quiere suceder en el cargo a Adrián Wences Carrasco, un personaje gris que no pudo levantar la
imagen de MC y que en el pasado proceso electoral se pronunció a favor de una
alianza con el PRD.
El empresario gasolinero se afilió al Partido Convergencia (lo que
actualmente es MC) en 2002, año en que renunció a las filas del PRI al no ser
postulado como abanderado a la Alcaldía porteña. Si no fuera por el apoyo del
PRD en 2012 no hubiese llegado a ser presidente municipal, ya que en 2002, 2005
y 2008 perdió ante los perredistas Alberto
López Rosas y Félix Salgado
Macedonio, y el priista Manuel
Añorve Baños, respectivamente.
En 2015 no fue recíproco, ya que se negó a establecer una alianza con el
PRD. A Walton le molestó que la candidata del PRD y el PT fuera Beatriz Mojica Morga y no él. E
inmediatamente inició una campaña de
lodo en contra del Sol Azteca y su candidata, endilgándoles que en 2012 llevaron
al poder en Iguala a José Luis Abarca
Velázquez, señalado como el principal autor intelectual de la desaparición
forzada de 43 normalistas de Ayotzinapa.
Walton logró que su otrora aliado perdiera la gubernatura ante el PRI. Ese
era su objetivo. Y no le fue mal. A MC le dieron dos secretarías de despacho en
el actual gobierno estatal.
Pero Walton, insisto, no es una
blanca paloma. Tiene señalamientos de maltratar y dar un trato injusto a
sus trabajadores, así como dar litros incompletos
en sus gasolineras. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) le ha
clausurado temporalmente bombas despachadoras de gasolina Magna y Premium en la
estación de servicio de La Diana, en Acapulco.
Asimismo, su partido también
apoyó a José Luis Abarca para que fuera presidente municipal de Iguala, y
en 2011 respaldó a Ángel Aguirre Rivero
para que fuera gobernador de la entidad.
Luis Walton siempre ha sido un farsante. En
su partido no prevalece la democracia. Él es que el impone a dirigentes en su
partido.
Siempre ha impuesto a su antojo a los dirigentes de su partido. En 2007
puso a Efraín Ramos Ramírez, en 2010
a Mario Ramos del Carmen y en 2013 a
Adrián Wences Carrasco. Todos han
sido sus empleados o peleles, ya que él es el verdadero mandamás de MC en
Guerrero.
En MC no hay competencia interna. Todos se subordinan a Walton. Y el que no se
cuadra, simple y sencillamente es marginado para no poder ocupar espacios al
interior de la dirigencia estatal ni ser postulado para un cargo de
representación popular.
Luis Walton presumen ser de izquierda, pero
es más ultraderechista que Donald Trump.
ENTRE OTRAS COSAS… La que de plano no está demostrando
liderazgo al interior de la Fracción Parlamentaria del PRD en el Congreso
local, es la diputada por Quechultenango, Erika
Alcaraz Sosa.
Algunos de sus compañeros se han quejado de que no sido capaz de
convocar a todos los integrantes de dicha bancada para poder discutir temas de
interés social. Es gris a todas luces. Y
eso le perjudica al Sol Azteca.
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