KARMELYNDA VALVERDE |
Entonces, era tanto el
amor que anidaba en su tabasqueño corazoncito, y tan no le cabía en el pecho
que alcanzaron ósculos amorosos la dupla Televisa-Dóriga, mismos a quienes
tiempito después les obsequió mentaditas de las que no son de menta y desfasado
como sabe mostrarse les endilgó toda clase de señalamientos.
En Psicología eso se
llama proyección, y a don Manuelito le cuachalanga proyectar en otros, todo lo
que él aborrece de sí mismo. Bueno, pero esa es otra historia. Y aclaro, para
que la cuatitud morenaza no se desgaste haciendo berrinches por lo que escribo,
que en ningún momento estoy asegurando que Doriga y los televisos sean
cuacuyules en conserva. ¡Nooo! de que tienen lo suyo, lo tienen, pero en esta
entrega me ocuparé de los escarceos amorosos en los que anda inmerso López
Obrador.
Pues bien, en su más
reciente desplante y sobaqueada, el dueño de MORENA convoca a la sociedad
tenochca a que inicien una ''guerra amorosa'' contra la mafia en el poder. O
sease que se armen mediante apapachos y picoretes para iniciar una revolución
de conciencias, y shampoos de cariño vía manifestaciones pacíficas y chalalá,
chalalá.
¡¡¡Ternuritaaaa!!!...neta
que se me hace de lo más tierna, su guerrita amorosa y su grito de amor y
paz...aunque yo no se por qué no le creo ni el bendito. Neta del planeta, que
admiro a los que se descamisan en defensa del tabasqueño, aunque no me gusta
que a la menor provocación insultan a los que no comulgan con la amueganada
pejejiana.
Confieso que he tratado
de comprarle sus choros mareadores a AMLO, pero hay algo que no me convence,
por más que me lo quierean vender como un ser extraordinario y cuasi santo.
Mucha contradicción para mi gusto, pues por un lado, don Manuelito que ha sido
un mega subversivo, sale con un choro mareador de haz el amor no la guerra,
hablando de la no violencia y otros chunches...y por el otro, sus seguidores se
injertan de tigre con pantera por la mínima diferencia de opiniones. ¿Quién los
entiende?
Ellos juran ante un altar
que en el 2018 López Obrador va, discúlpenme pero perdónenme, eso no los van a
decidir sus seguidores sino Dios que es el único que pone y quita reyes y
gobernantes. Les guste o no pero así mismo es. Y si AMLO entra en los planes
que papá Dios tiene para nuestro país y para el mismo tabasqueño asi será.
En vía de mientras, hay
que dejarlo ser con su campaña amorosa. Hay que darle chance que siga aplicado
en convocar a la raza tenochca que simpatiza con el, a que reparte picoretes y
apapachos a sus adversarios politicoides y tomen las armas del amor. ¿A poco no
es una ternurita de señor?