lunes, 4 de marzo de 2013

Inestabilidad Política Estatal Mecedores de Cunas Por Rodrigo Huerta Pegueros*


Rodrigo Huerta Pegueros

Siguiendo la lógica de las autoridades federales sobre lo que ocurre en el estado de Guerrero, nos lleva a pensar que no es una, ni dos, sino muchas más las manos que mecen las cunas (léase movimientos sociales) con el interés de provocar una especie de estado intranquilo, e ingobernable, lo cual le permitiría a la federación hacerse cargo de la gobernabilidad que pareciera se está perdiendo poco a poco.
Lo que no queda claro, es el doble lenguaje con el cual se están tratando de comunicar con la opinión pública los jefes militares, los funcionarios policiales de la Secretaría de Gobernación y otros personeros de la política nacional priista, pues mientras tratan de querer dar certidumbre a la población, en el sentido de que se tienen bien identificados a quienes tratan a toda costa de subvertir el orden en el estado de Guerrero, solo provocan mayor confusión, nerviosismo y hasta tensión entre los grupos sociales que están haciendo la tarea que le correspondería realizar a las fuerzas del orden público, como es el de ofertar la seguridad pública a los ciudadanos de este territorio guerrerense.
Pero si la incertidumbre y la confusión son malas consejeras para cualquier ciudadano de a pié, el hecho de que se juegue con la adivinanzas para suponer quién o quiénes están tratando de provocar la inestabilidad social, es mucho mas grave, pues en una entidad como la nuestra, donde las autoridades de todos los colores y todos los niveles cuentan con poquísima confianza, lo que están provocando es una especie de sicosis donde todos se miran recelosos y desconfiados por el prurito de que se esté frente o cercano a quienes se les ha colgado el mote de ‘’mecedores de cunas’’.
Pues si bien es cierto que tanto los altos mandos militares de la región como el nuevo comisionado de policía de la Secretaría de Gobernación han expresado ante civiles y la televisión, respectivamente, que detrás de los grupos denominado de autodefensa popular que han surgido en varios municipios de la entidad, hay personas que los controlan, que los dirigen y los mueven a su antojo.
Pero si esta es la lógica militar y policiaca del gobierno de la República, luego entonces, no solo existe una sola mano que mueve una cuna, sino que son varias manos las que mecen varias cunas a la vez, pues el estado de cosas que persisten en esta entidad son variadas y diferentes y cada una podría ser manejada al antojo de un gobernante, un político partidista, un empresario, un dirigente universitario, un ex mandatario, un militar venido a menos o un capo o delincuente común, etc. Etc.
Si bien es cierto que se habló de los grupos de autodefensa armados que han surgido dada la inseguridad pública que tienen en su territorio, éstos no han tenido mayor interlocución más que con el jefe del ejecutivo estatal quien incluso los ha ido a presentar ante el titular de la Secretaría de Gobernación, con quien dialogaron y no se sabe—porque no se dijo nada al respecto—si habían llegado a una especie de acuerdo y cuáles fueron y en que términos se suscribieron, pues de ser así, la embestida posterior nos dicen que no se lograron concretar y que en cambio ahora saben quién es el que los maneja a su antojo y por cuestiones meramente de interés político.
Pero nos preguntamos, ¿porqué solo se han referido a los grupos de autodefensa y no a quienes se han autodenominado policías ciudadanas, civiles y comunitarias? ¿Porqué no han incluido en estos grupos que causan inestabilidad política a los normalistas de Ayotzinapa o a los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG)?, pues también a estos seguramente los mece una mano invisible para los ciudadanos de a pié, pero demasiado vista por quienes manejan la seguridad pública, la inteligencia policial y política de los tres niveles de gobierno.
Por lo tanto, lo que se causa con esta clase de mensajes cifrados a la población, es un aviso de preocupación y no de tranquilidad como bien lo mereceríamos los guerrerenses a fin de que todos nos ocupáramos de nuestras tareas cotidianas sin tener que pensar en que algo malo o peor nos pudiese suceder, sobre todo, cuando no tenemos injerencia en estos conflictos de intereses que se mezclan y hacen de ello un coctel explosivo que quien sabe cuándo vaya a detonar y cuáles serán las consecuencias.
Luego entonces, si las autoridades civiles y militares tienen bien identificados a los que mecen las cunas que provocan inestabilidad social y política en el estado de Guerrero, lo procedente sería que se les detuviera y se les sometiera al estado de derecho y se hiciera cumplir la ley. De no hacerlo así,  estarán contribuyendo a que en Guerrero la inestabilidad política se acrecente y desemboque en una especie de ingobernabilidad—aunque les de urticaria los mandatarios—que provocará la remoción de mandos importantes y con ello se asegure el desarrollo de una vida apacible y productiva de la ciudadanía guerrerenses.

P.D. Por cierto, si usted conoce algún nombre de esos que se dicen son mecedores de cuna, favor de comunicarlo para tenerlos presentes para un nuevo apunte editorial.

Periodista/Analista Político*