jueves, 15 de enero de 2015

MIRADA INTERIOR DECLARACIONES DOLIDAS LA OCTAVA REGIÓN DE GUERRERO INFORME DE ROM. Por: Isaías Alanís

A Alfredo Castro, por el reencuentro en plena sierra de Guerrero

Es inverosímil como le ha llovido críticas al senador Armando Ríos Piter por su anuncia de no buscar la candidatura a gobernador por el partido del sol azteca.  Articulistas, expertos comunicadores de las redes sociales, amas de casa, paseantes de las urban de Chilpancingo y miembros distinguidos del politburó del café exprés han volcado sus lanzas contra el senador de la republica. Sus fines tendrán. Sin embargo, se extra limitó al haber declarado que los políticos de todos los partidos pertenecen al auténtico partido de la revolución post mexicana, el denominado, NARCOYO. Y por esa declaración alégorica y no precisamente de paja, le volvió a llover mentadas que algunos políticos arrastran sobre su “lomote”, desde el artículo aparecido en Milenio en noviembre del año pasado, donde por cierto, no aparece el nombre del senador, alguna vez ligado a coquetear con miembros distinguidos de las ligas mayores del NARCOYO, aposentados en la costa Grande de Guerrero.

Este sainete declarativo jaguarino, cae en medio de las aguas turbulentas por la selección de candidatos en todos los partidos. Están en juego jugosos trofeos de guerra; y el más importante es la gubernatura, en donde ya sólo quedan por el PRD, Beatriz Mojica Morga y Sofío Ramírez Hernández. Y por el Tricolor tal parece que ya las cúpulas llegaron a un acuerdo, haber si no se les chispotea en el último minuto.
Lo cierto es que esta fiesta declarativa de todos los actores políticos, tiene objetivos bien claros, apuntar a los reflectores que les permitirán estar en el ajo. Habrá que ver hacia donde apuntan las señales de la jaguarina dolida y sentimental y si en el PRD, se ponen de acuerdo. En el tricolor ya hay consenso.

Hoy viernes 16 de enero es un día histórico para los municipios, pueblos rancherías, comunidades que conforman la sierra de Guerrero, el gobernador ROM se trasladó al corazón de la sierra, para expedir el decreto para la creación de la Octava Región de la Sierra de Guerrero. Sueño de miles de sierreños que esperan con este acto sacar del olvidó a hombres y mujeres de las montaña que han esperado decenas de años para ser visibilizados con proyectos de desarrollo sustentable. En la Sierra se hayan las reservas de flora y fauna más importantes de México. También, por lo mismo, su desarrollo se orientó a la siembra de marihuana y amapola; la explotación de los bosques bajo estándares poco sustentables, y por todo lo que la geografía da y la falta de vías de comunicación, quita; la sierra se convirtió en un universo aislado del propio estado y la federación. Este reduccionismo alejado de todo, le permitió a los sierreños crecer bajo un adn autónomo teniendo sólo como fronteras los riscos, bosques y la libertad para inventar su desarrollo lo que consolidó a un pueblo fuerte, tozudo, luchón que pese a la distancias se ha mantenido bajo los términos de un proyecto autogestivo comunitario que se despeñó al iniciarse la siembra de enervantes, y en la actualidad, a su procesamiento y trasiego. Para nadie es desconocido su potencial, tan sólo en la siembra de amapola en la que Guerrero tiene el primer lugar. ¿Cuándo será la sierra la primera productora de aguacate, durazno, hongos; productos lácteos, paraíso del turismo de aventura y una selva y bosques de paz y progreso?

Con el nacimiento de la octava región cultural, económica y política de Guerrero, el gobierno federal debe de poner los ojos en la sierra, y que los planes que surjan, por ejemplo, para la conservación de la biodiversidad y la explotación racional de los bosques que todavía quedan, no se conviertan en elefantes blancos debido al rentable negocio de la corrupción desvergonzada de políticos, funcionarios menores y mayores de los tres niveles de gobierno o, en su caso más grave, que continúe la siembra de enervantes y procesamiento de sustancias químicas prohibidas.
Y que el grave problema de inseguridad, de los desplazados, de los territorios que disputa el crimen organizado en una región autónoma, mediante el nuevo ordenamiento legal, económico, cultural y de desarrollo, sean demolidos de raíz y que los mecanismos extra “legales” utilizados en una región olvidada por el desarrollo, cambien paulatinamente. No es nada fácil, son decenas de años de atraso en todos los rubros que los sierreños han sabido vencer con inteligencia, sentido práctico y arresto. Hoy la voluntad del gobierno federal y estatal, deben de saber que se van a encontrar con una población de implacable inteligencia y  capacidad de respuesta. De una población que se rige todavía, en algunos casos,  bajo esquemas de principios del siglo pasado y que pese a todo han sobrevivido a su entorno con fuerza de voluntad y capacidad creadora. Con pueblos, rancherías, municipios donde la gente conserva un legado impresionan de arraigo óntologico y cosmogónico a su territorio, a su tierra y a sus comunidad. A un campesino de Buena Vista, le escuché decir: “yo soy de los de antes, de la sangre vieja, mi abuelo fue el fundador del pueblo y él trajo a este lugar, la virgen de Guadalupe y la campana para la iglesia, el medía la tierra y la repartía, de él sólo era toda la tierra, ¿por qué me han sacado de mi pueblo y ahora soy un desplazado más que dejó todo allá arriba, donde las águila las vemos volar debajo de nosotros y al cielo pasar en nuestros pies?…”.

DE REOJO

El jueves 15 de este mes, Rogelio Ortega Martínez gobernador de Guerrero entregó al congreso del estado su informe de labores. Evento cuya manufactura fue de mero acto republicano sin fanfarrias y carísimos montajes espectaculares que no abonan en nada al estado de crispación social en que vive Guerrero. Es un ejemplo de fervor republicano. El documento es claro, sin tropiezos histriónicos ni demagogia barata. Un documento sencillo que da cuenta a la soberanía popular del estado que guardan als finanzas públicas y los avances en diversos temas de la agenda y del Plan Estatal de Desarrollo de Guerrero. En hora buena.