viernes, 10 de mayo de 2013

IMPIDE PROFEPA LA EXPORTACIÓN ILEGAL DE RESIDUOS PELIGROSOS


Asegura 18 toneladas de residuos electrónicos que pretendían salir del país
Actuó de acuerdo a lo establecido en el Convenio de Basilea
La Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (PROFEPA) aseguró 18.720 toneladas de residuos electrónicos considerados como peligrosos que pretendían salir del país sin acreditar los trámites correspondientes para el legal despacho de estos, en el Puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán.

El material está catalogado como riesgoso y dañino para el medio ambiente, en el Convenio de Basilea del cual México es firmante
Este decomiso se suma a las 132 toneladas aseguradas de dicho material por inspectores de la PROFEPA en lo que va de la presente administración, así como de las 62 toneladas de baterías usadas y las 25 toneladas que han intentado ingresar ilegalmente a nuestro país.
La acción de los inspectores de la PROFEPA ocurrió ante la solicitud realizada por la agencia aduanal y ante el operador del recinto fiscalizado, por lo que se procedió a realizar identificación y revisión de los diferentes tipos de Residuos Electrónicos, conforme a lo señalado en la factura No. A 167, y A 167-1.

Ante ello, se elaboró el Acta Circunstanciada, a fin de hacer constar puntualmente que la mercancía incluida en el contenedor, así como la documentación requerida para el adecuado despacho de este tipo de residuos electrónicos no estaba conforme a la Normatividad Ambiental Aplicable.

Los desechos electrónicos constan de antenas, material eléctrico, unidades de cd, teléfonos, eliminadores discos duro, lap-top, servidores, tableros de autos, fuentes poder, reguladores, interruptores y recortes de tarjetas electrónicas y 180 kilogramos de baterías usadas plomo-ácido, residuos que requieren autorización por parte de la SEMARNAT para su movilización en territorio nacional.
Cabe recordar que el Convenio de Basilea tiene como objetivo reducir al mínimo la generación de desechos peligrosos y su movimiento transfronterizo, así como asegurar su manejo ambientalmente racional, para lo cual promueve la cooperación internacional y crea mecanismos de coordinación y seguimiento. El instrumento internacional fue adoptado por la Conferencia de Plenipotenciarios el 22 de marzo de 1989, mediante la firma de 116 países; México ratificó el convenio el 22 de febrero de 1991, siendo publicado en el Diario Oficial el 9 de agosto de ese mismo año, y las disposiciones generales fueron adoptadas el 5 de mayo de 1992, fecha de la entrada en vigor de este instrumento. Es el más antiguo en materia de residuos peligrosos y sustancias químicas.