Holmul, ubicada en el noreste de
Peten, Guatemala, fue frecuentada por el pueblo vecino de Tikal y los
teotihuacanos para luego ser dominada por Naranjo
La arqueóloga Anya Shetler limpiando
la inscrición del friso de Holmul en el momento de su descubrimiento (F.
Estrada-Belli / Proyecto Arqueológico Holmul)
Arqueólogos descubrieron “el friso más
espectacular hasta ahora visto” durante las excavaciones en julio de 2013 en la
ciudad maya Holmul, en Peten, Guatemala, que data de una época del año 600 d.
C.
Está "ricamente decorado con
imágenes de dioses y gobernantes y una larga inscripción dedicatoria”, que
viene a contar cómo fue la historia de la ciudad, informó este miércoles el
Ministerio de Cultura y Deportes de Guatemala.
Holmul es una ciudad Maya que surgió
en los años 800 a. C en el noreste de Peten, en la frontera con Belice, y
perduró hasta alrededor del año 850 d. C, según investigaciones a cargo de la
Universidad de Boston. Las primeras excavaciones se iniciaron en 1911 y los
primeros estudios fueron publicados en 1932 por Mervin y Vaillant.
El friso de ocho metros de largo y dos
de alto se extiende en la parte superior de un edificio rectangular de unos 10
metros, donde está la plaza de Holmul.
La gran pieza maya muestra a tres
personajes vistiendo ricos atavíos de plumas de quetzal y jade, sentados sobre
cabezas de monstruos witz (cerro).
“El personaje central se identifica
como Och Chan Yopaat por los signos jeroglíficos en su tocado y en el texto
debajo de su imagen”, dice el reporte de los arqueólogos, dado también por la
Fundación de Patrimonio Cultural Maya (PACUMAN).
“Desde la boca del monstruo central se
desprenden serpientes emplumadas de las cuales emergen los ancestros y los
cerros laterales. Entre ellos están las figuras de dos dioses ancianos,
otorgándole al personaje central un objeto identificado por un signo
jeroglífico como “primer tamal”, destaca el informe.
Una ‘banda celestial’ desplegada en la
parte superior del friso muestra una franja de símbolos astrales. Para los
arqueólogos esto significaría que las figuras representadas se encuentran en el
mundo celestial de dioses y ancestros”, destaca PACUMAN.
El hallazgo se realizó mientras el
equipo del arqueólogo Francisco Estrada-Belli buscaba más indicios en relación
a una tumba encontrada en el mismo lugar en excavaciones anteriores. Aunque se
había descubierto una máscara de madera, se desconocía la verdadera identidad
del difunto.
Estrada Bell explica que los mayas
representaron a los gobernantes divinizados y escribieron en el friso sus
nombres, y los ubicaron junto a sus dioses.
El texto se compone de unos 30 signos
jeroglíficos que están sobre una banda que corre en la base de todo el relieve.
El epigrafista Alex Tokovinine de la
Universidad de Harvard y colaborador de este proyecto de investigación,
descifró el texto y destacó que el edificio donde se encuentra el mismo, fue
dedicado por Ajwosaj, rey de la vecina ciudad de Naranjo y vasallo del poderoso
Reino Kan.
Según el texto "puso en
orden", Ajwosaj dispuso de una serie de dioses locales y un posible
gobernante local, llamado Och Chan Yopaat, cuyo significado es "el rayo
entró al cielo".
“Este texto, nos cuenta de una forma
muy explícita que Naranjo (sitio maya vecino del Valle Holmul) intervino de una
forma directa para establecer una dinastía más aliada al Reino Kan (dinastía
Maya) en un centro como Holmul, tan cercano a Tikal (ciudad maya a 35 kilómetros)
durante la fase inicial de la época de conflictos con Tikal, en el sexto y
séptimo siglo de nuestra era”, señala Tokovinine.
Según los arqueólogos, viene a
confirmar “muy claramente”, “que Holmul en el siglo quinto tuvo relación con
Tikal junto a la llegada de guerreros teotihacanos al área maya”.
Teotihuacan, según arqueólogos
mexicanos, fue una ciudad que surgió antes de la era de Cristo y floreció
alrededor del siglo IV d. C. con difusión militar y comercial a sus
alrededores. El inicio de su abandono fue en el año 500 en adelante, y aumentó
después de finalizar la época de apogeo entre los años 450 y 650 d. C. El
declino de esta ciudad finalizó en 850 d. C.
Tikal a su vez nació cuatro siglos a.
C. y fue un importante centro de dominio maya, una ciudad muy conectada a las
otras regiones tanto a nivel político como económico. (Pirámide de Tikal)
A su vez la ciudad maya de Naranjo,
ocupa un sitio de cerca de un kilómetro cuadrado en el valle de Holmul. Cuenta
también con estructuras ceremoniales y complejos agrupados de a tres
construcciones piramidales. Fue descubierto en 1905, según investigaciones del
arqueólogo Maler publicadas en 1908, informa la Universidad de Harvard.
Muchos saqueos se realizaron en esta
zona, tanto en Holmul como en Naranjo. Se conserva, de esta última, una réplica
de una máscara de jade, en tanto la original fue robada.
El texto del friso maya de Holmul,
confirma la creencia que esta ciudad pasó al dominio de las autoridades de
Naranjo, que “entró en sucesivas guerras y alianzas en contra de Tikal”, señala
el arqueólogo guatemalteco.
“Este es un hallazgo extraordinario
que solo una vez se da en la vida de un arqueólogo”, expresó Francisco Estrada-Belli,
según el mismo informe.
“Es una gran obra de arte que también
nos proporciona mucha información sobre la función y significado del edificio,
lo cual era el enfoque de nuestra investigación. Teníamos la esperanza de
encontrar algunos indicios sobre el por qué de este edificio y de su entierro
pero algo así va más allá de cualquier expectativa, agrega el arqueólogo.